Las oportunidades de la energía marina en Chile
“Chile tiene un gran potencial de energía marina, y debemos continuar trabajando para hacer posible que su implementación se convierta en una realidad en el futuro”.
Por Gonzalo Tampier, ingeniero Naval y académico de la Universidad Austral de Chile
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La crisis sanitaria que estamos viviendo, junto con las graves consecuencias que la misma traerá para nuestra economía, nos invitan a reflexionar en cómo lograr una reactivación económica, más allá del bussiness as usual.
En el ámbito de la energía, por ejemplo, las crisis nos pueden enseñar que el costo por MWh no es lo único que importa. Aspectos como diversificación, resiliencia e independencia energética comienzan a tomar una mayor importancia. Asimismo, la cadena de valor detrás de una determinada fuente de energía -generando empleos, inversión y, en especial, innovación- es un factor que puede contribuir sustancialmente a la reactivación económica tras una crisis.
La energía eólica y la energía solar, que corresponden a las fuentes de ERNC más exitosas en nuestro país, han ido tomando un rol cada vez más importante dentro de nuestra matriz energética, y si bien se han caracterizado por contribuir positivamente a una mayor empleabilidad, aún dependen en gran medida de tecnologías desarrolladas y fabricadas íntegramente en el extranjero.
La energía de los mares, aquella proveniente de las olas, corrientes mareales y – más recientemente- la energía eólica de turbinas flotantes costa afuera, son fuentes de energía renovable con un alto potencial para nuestro país y su extensa costa, con componentes y estructuras que en parte pueden ser fabricadas en Chile. A escala global, las tecnologías disponibles aún no se encuentran en un nivel de desarrollo comercial, y aún se deben superar múltiples desafíos para lograr un costo de energía más competitivo.
Para Chile, estos desafíos se convierten en oportunidades que nos permiten generar conocimiento y aplicarlo a nuestro entorno local. En este contexto, el centro de investigación MERIC (Marine Energy Research and Innovation Center) busca adaptar las tecnologías de energía marina para enfrentar los riesgos naturales que caracterizan a nuestro país, aprovechando y desarrollando las capacidades locales de fabricación, instalación y mantenimiento que ofrecen industrias tales como, la naval, la acuícola y la minera.
Las oportunidades que abre la energía marina en Chile no sólo se limitan al ámbito energético, también abre oportunidades para el desarrollo de otras actividades económicas en el mar. Ejemplos de estas oportunidades son la combinación de dispositivos de energía marina con instalaciones de acuicultura offshore o con instalaciones de bombeo o desalinización de agua para la minería, aspectos que ya se encuentran en estudio y que podrían generar interesantes sinergias.
Chile tiene un gran potencial de energía marina, y debemos continuar trabajando para hacer posible que su implementación se convierta en una realidad en el futuro. Así, contaremos con una nueva fuente de energía renovable que contribuirá a una matriz más diversa y resiliente, que generará empleos y que abrirá oportunidades para el desarrollo de nuevas actividades económicas en el mar.
