Revista Nueva Minería

Esteban Domic

25-09-2012 Nueva Minería & Energía
La trayectoria del ingeniero civil de minas de la Universidad de Chile está marcada por su importante aporte en el campo de la hidrometalurgia del cobre, la lixiviación en pilas, extracción por solventes, y la electro-depositación para cobre en el país

Sin duda, marcó una huella importante en la historia científica minera chilena. Esteban Domic se formó en la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Chile, y en 1974 recibió el título de Ingeniero Civil de Minas. Posteriormente, completó su formación académica tras haber cursado estudios en el programa de Magíster en Metalurgia Extractiva de dicha casa de estudios.

Aún siendo estudiante, ingresó en 1969 como ayudante de investigación en el Instituto de Investigaciones Tecnológicas Intec-Corfo bajo la dirección del ingeniero Robert B. Filbert, experto en extracción por solventes para recuperar uranio durante la 2ª Guerra Mundial en el proyecto Manhattan, con quien elaboró su memoria de título “Aplicaciones de la extracción por solventes para cobre”, trabajo pionero en el país en esa área del conocimiento para la época.

Ya como investigador de Intec, y hasta 1975, Domic trabajó en aplicaciones de electroquímica avanzada, tanto para la electrólisis directa de cobre desde sulfuros minerales, como en el estudio de los mecanismos electroquímicos de la lixiviación bacteriana bajo la dirección del profesor Helmut Tributsch, del Max Planck Institute, Alemania.

Tras su preparación académica, Domic ingresó en 1976 como metalurgista al Proyecto Lo Aguirre de la Sociedad Minera Pudahuel, SMP.

“La mina, ubicada a las afueras de Santiago, presentaba numerosos desafíos. Se trataba de un cuerpo mineralizado con un cambio gradual desde casi puros minerales oxidados de cobre, en su parte exterior, pasando a casi puras especies sulfuradas en su parte más profunda. Esto obligaba a hacer una doble inversión, construyendo una planta para los óxidos y, a los cuatro años de operación, debía incorporarse también una planta concentradora para los sulfuros. Por otra parte, el yacimiento era más bien pequeño y daba para unos 10 años de operación. La cercanía de Santiago imponía de partida un estricto control ambiental, muy difícil de cumplir con las tecnologías existentes a esa fecha”, cuenta Domic.

Importantes aportes científicos

Años después, su experiencia como investigador le permitió diseñar un nuevo tratamiento hidrometalúrgico, que en una sola planta de lixiviación en pilas -inicialmente propuesta sólo para minerales oxidados y que mediante la incorporación inédita de técnicas bacterianas inducidas, podía tratar también las especies sulfuradas- permitía recuperar eficientemente ambos tipos de minerales, con la producción directa al lado de la mina de cátodos de cobre y con un proceso más amistoso con el ambiente.

Dicho tratamiento fue denominado “proceso de lixiviación TL” (“TL”=“thin layer”) por la formación de pilas en “capas delgadas”. Gracias a este desarrollo, en 1981 se le concedió la Patente de Invención Nº 32.025 a Domic, la cual fue cedida a SMP. La Planta de Lo Aguirre inició exitosamente sus operaciones en 1980 hasta la extinción de sus reservas en el año 2000.

“La Planta de Lo Aguirre fue tecnológicamente exitosa. Sus reservas económicas, al bajar los costos presupuestados, se extendieron por más de 20 años frente al proyecto original que auguraba tan sólo 10 años de vida. En los años sucesivos, Pudahuel se transformó en una verdadera escuela para el aprendizaje de cientos de operadores, técnicos y profesionales que, con posterioridad, se distribuyeron por todo Chile al generalizarse esta tecnología a partir de su aplicación masiva en la década de los ’90”, comenta el ejecutivo.

Durante los años siguientes, SMP proporcionó a Domic los recursos para mejorar y perfeccionar el proceso, además de promoverlo para su aplicación en otros proyectos de cobre. Este apoyo se materializó en la creación de un grupo de investigación y desarrollo de excelencia, esfuerzo inédito para una empresa privada y más aún, perteneciente a la mediana minería de ese momento. Sin embargo, estos esfuerzos no prosperaron sino hasta la década siguiente dada la decaída actividad económica y bajo precio del cobre en los años ’80.

En 1987, Domic se trasladó al grupo Anaconda, actualmente Antofagasta Minerals, donde aplicó la misma tecnología de lixiviación en pilas, esta vez usando agua de mar en el Proyecto Lince, Michilla, II Región, cuyo diseño e ingeniería lideró hasta 1990.

“Creo que desde su inicio en Pudahuel, el “proceso de lixiviación TL” ha cambiado el curso de la hidrometalurgia y de la minería nacional al permitir económicamente la explotación de diversos otros proyectos, muchos de carácter económicamente marginales, y que gracias a este proceso se realizaron con éxito durante la década de los ’90 y continuaron hasta hoy”, dice Domic.

Prueba de estos cambios, de los cuales Domic fue un artífice, es que el tonelaje de cobre como capacidad instalada nacional del proceso LX-SX-EW, aumentó desde tan sólo 120.000 toneladas de cátodos anuales en 1990, gracias a la introducción de este proceso, a 1,4 millones de toneladas en 2000 y a 2,2 millones de toneladas de cátodos anuales en 2010, de acuerdo a los anuarios de la Comisión Chilena del Cobre, Cochilco.

Otra veta que ha desarrollado Domic es la académica. Desde 1977, e ininterrumpidamente hasta hoy, el ejecutivo es profesor de Hidrometalurgia del Departamento de Ingeniería de Minas de la Universidad de Chile. En 1990, dicha casa de estudios le concedió la jerarquía académica de Profesor Titular.
En tanto, en 2001 editó el libro “Hidrometalurgia, fundamentos, procesos y aplicaciones”, en el que volcó su experiencia docente y como ingeniero de procesos para la formación de los futuros profesionales de esta especialidad.

Gracias al exitoso desarrollo de su “proceso de lixiviación TL”, Domic ha sido reconocido por sus pares y por otras instituciones con numerosos premios y distinciones. El año pasado fue galardonado con el Premio “Alexander Sutulov”, que es entregado cada año por el Ministerio de Minería, el Instituto de Ingenieros de Minas, entre otras instituciones, en virtud de su aporte a la investigación científica y/o tecnológica en materias geológicas y/o minero-metalúrgicas.

Domic agradeció emocionado esta distinción que reconoce, además, una destacada trayectoria ligada a la minería, que incluye la presidencia del Instituto de Ingenieros de Minas de Chile, institución de la cual es socio hace más de 40 años y en la que fue distinguido como miembro honorario en 2012.