Proyecto minero Antucoya: Renaciendo de las cenizas

17 enero, 2014
Proyecto minero Antucoya: Renaciendo de las cenizas

Reportaje sobre el proyecto Antucoya

Hoy por hoy, la nueva apuesta del grupo Antofagasta Minerals se encuentra con un progreso total de un 44% en cuanto al diseño, provisión y progreso físico, y un 14% del avance de la construcción

Daniela Tapia – Revista Nueva Minería & Energía

Con gran expectación, en 2011 se anunciaba la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental de uno de los proyectos mineros “estrella” de la compañía Antofagasta Minerals: Antucoya, un depósito de minerales oxidados ubicado en la Región de Antofagasta, comuna de Mejillones, aproximadamente a 45 kilómetros de la costa.

En ese entonces, el grupo minero también anunciaba la firma de un memorándum de entendimiento con Marubeni Corporation, a través del cual la compañía japonesa se convertiría en socio del proyecto, con el control del 30% de la propiedad, mediante un desembolso de alrededor de US$ 350 millones. La firma también se haría cargo del 30% de los costos de desarrollo del proyecto, mientras que el 70% restante correspondía a Antofagasta plc.

El proyecto se basa en reservas probadas y probables de mineral por 642 millones de toneladas, con una ley de 0,35% de cobre, a partir de una ley de corte de 0,21%, leyes que están entre las menores de los nuevos proyectos mineros a ejecutarse en el país. Tal condición es compensada por factores como su poca profundidad relativa, lo que reduce la duración y el costo de la fase de pre-stripping, así como su baja relación estéril-mineral (aproximadamente 1 a 1).

Igualmente, el yacimiento está ubicado en una zona de desarrollo minero con buena infraestructura preexistente.

La nueva mina, en tanto, tendría una vida útil de aproximadamente 20 años, con un promedio de producción de 80.000 toneladas de cobre en cátodos al año, mediante un sistema tradicional de lixiviación, ocupando agua de mar sin desalar.

Sin embargo, en 2012 el proyecto sufrió un revés inesperado. La iniciativa de los Luksic engrosó las filas de los proyectos suspendidos tras el aumento de costos que desde hace algún tiempo está afectando a la industria minera.

Especialistas del sector indicaron que el proyecto, más allá de las últimas actualizaciones, requería sobre US$ 2 mil millones para ser desarrollado. Pero el factor principal de su suspensión se atribuye al impacto en sus costos operacionales, especialmente por el mayor precio de la energía. La iniciativa, en tanto, debía comenzar su operación en 2014 y requería inicialmente inversiones de unos US$ 1.300 millones.

Las razones de la suspensión

¿Qué ocurrió? En palabras del presidente ejecutivo de Antofagasta Minerals, Diego Hernández, “cuando terminó el estudio de factibilidad, en septiembre de 2011, el proyecto preveía US$ 1.500 millones. Pero el aumento al día de hoy supera el 20%. Además, se estaba estudiando construir una planta de ácido para mejorar la rentabilidad del proyecto, lo que sumaría otros US$ 350 millones a US$ 400 millones adicionales”.

El ejecutivo además detalló que si se mira la evolución de costos en los proyectos de la industria desde fines de 2010 a fines de 2012, los principales ascensos corresponden a los equipos mineros con un 30%, construcción de campamentos, con 42% de incremento, alcanzando más de UF 50 por metro cuadrado, y costos de construcción y montaje, con un alza de 40%.

“Por otro lado, los aumentos de costos de operación relevantes en la minería están en energía, con un incremento de alrededor de 35%, e insumos, con un aumento de 20% a 40%, incluyendo explosivos, reactivos, neumáticos, repuestos”, dijo.

Otro aspecto al que se refirió el ejecutivo fue la disminución de leyes, que si bien es una realidad común para la mayoría de los países mineros, ha afectado un poco más a Chile.

Como botón de muestra: si en el año 1992 sólo el 21% de la producción mundial tenía una ley más alta que el promedio de la ley en Chile, en 2010 esa cifra subió a 35%. En tanto, para el año 2020, el 43% de la producción mundial podría tener mejor ley que Chile.

Así y todo, Hernández explicó que la manera de abordar el proyecto era con cuatro contratos principales EPC, y el resto a través de un EPCM. “Todos estos contratos habían sido licitados con información que teníamos en esa época, tratando de apurar el proyecto y poder ponerlo en producción cuanto antes. Las condiciones han cambiado y nosotros estábamos con mucha preocupación”.

Tras este hecho se desencadenó el “efecto dominó”. “Ahí tuvimos la desa-gradable sorpresa de que el presupuesto aumentó, por lo que decidimos parar, cancelar todos los contratos y revisar el proyecto nuevamente, así como los contratos”.

Cuál “ave fénix”

Luego de este golpe, a comienzos del año pasado el Directorio de Minera Antucoya resolvió retomar el desarrollo de su proyecto de cobre en la Región de Antofagasta, tras completar su revisión. Tal como un ave fénix renace de las cenizas.

Los contratos fueron relicitados con las mismas empresas, “pero a las que habíamos cancelado sus contratos. Pero esta vez ellas tenían muchos más elementos, más información de ingeniería de detalle y más avanzada en su estudio, ya con una certidumbre mucho más grande de que efectivamente no vamos a tener sorpresas desagradables, y que estos nuevos contratos están a precio firme y con unos alcances bastante bien definidos”, comentó Hernández a la prensa.

Tras la revisión de costos, se determinó una inversión requerida total de aproximadamente US$ 1.900 millones, de los cuales US$ 500 millones habían sido desembolsados al momento de suspender el proyecto a fines de 2012.

Otros US$ 650 millones serán otorgados a través de un crédito por una serie de instituciones financieras que incluyen al Japan Bank for International Cooperation, el Export Development de Canadá, el KfW IPEX-Bank GMBH, Mizuho Bank, el Sumitomo Mitsui Banking Corporation y Natixis, de Francia, el ING Capital LLC, de Holanda, y los bancos chilenos CorpBanca y BancoEstado.

“El proceso de financiamiento marcará un hito de gran relevancia para el grupo, ya que permitirá viabilizar un proyecto en el que hemos depositado mucho esfuerzo y dedicación. Estamos convencidos de que su operación no sólo significará un importante aporte en el crecimiento del grupo, sino también en el desarrollo nacional”, sostuvo el vicepresidente de Finanzas de Antofagasta Minerals, Alfredo Atucha.

En tanto, se espera que la producción comience finalmente durante 2015, con un promedio anual de 85.000 toneladas de cátodos de cobre en los primeros diez años de vida de la mina.

Al respecto, Diego Hernández, presidente Ejecutivo de Antofagasta Minerals, declaró que “después de la revisión detallada del proyecto Antucoya y de las medidas que hemos adoptado desde diciembre de 2012, hemos obtenido un mayor nivel de seguridad en relación con los costos de desarrollo del proyecto. Creemos que Antucoya será un valioso aporte a la cartera de operaciones del grupo una vez que entre en producción”.
Y agregó que “la decisión de reiniciar el proyecto Antucoya es consistente con el enfoque del grupo en una asignación disciplinada de capital. Como se subrayó en los resultados anuales de 2012, nuestra posición financiera sigue siendo fuerte”.

Durante la construcción del proyecto se emplearán sobre 5.000 personas, mientras que en la operación se consideran entre 1.200 y 1.400 trabajadores. Hoy por hoy, el proyecto se encuentra con un progreso total de un 44% en cuanto al diseño, provisión y progreso físico, y un 14% del avance de la construcción.

PROYECTO ANTUCOYA

Propietarios:
Antofagasta plc (70%) y Marubeni Corporation (30%).

Ubicación:
125 kilómetros al noroeste de Antofagasta, en las comunas de María Elena y Mejillones.

Aspectos significativos del proyecto:
Antucoya es un proyecto de lixiviación de cobre en pilas, con procesos de extracción por solventes y electro-obtención, ubicado en las comunas de Mejillones y María Elena, en la Región de Antofagasta.

Aporte del proyecto Antucoya a las operaciones de Amsa:
85 mil toneladas de cobre fino al año.

Principales obras:
– Planta de electro obtención y extracción por solventes
– Taller de camiones
– Planta de chancado
– Campamento para aproximadamente 1.000 personas y barrio cívico

Empresas de ingeniería:
SNC Lavalin (contratista principal).

Término de etapa de factibilidad:
Septiembre 2011.

Permisos ambientales y sectoriales:
Resolución de Calificación Ambiental obtenida en junio de 2011.

Inicio de construcción:
Primer semestre 2012.

Noticias Relacionadas