Revista Nueva Minería

¿Cobre presente en pañales o en envases de alimentos como las cecinas? Un emprendimiento nacional busca insertar micropartículas del metal rojo en diversos productos domésticos para entregar las especiales cualidades biocidas de este mineral.

Por Camila Morales
Revista Nueva Minería y Energía
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Hace ya unos años que las propiedades del cobre para prevenir infecciones son reconocidas a nivel mundial. Sus características físicas y químicas lo convierten en un material de elección en una amplia gama de aplicaciones de importantes industrias, que buscan un desarrollo más sostenible.

Interesados por estas cualidades, Raúl Molina y Javier Lavín se dieron cuenta de las variadas aplicaciones que puede tener este mineral para el control de microorganismos. Estos profesionales se conocieron trabajando en una mina en el norte del país, y con el paso del tiempo comenzaron a tener mayor interés por explorar las propiedades del metal rojo.

Tras una profunda investigación, estos profesionales lograron manejar y mejorar la bio-disponibilidad del cobre en distintos ambientes y condiciones biológicas, para adaptarlo a diferentes polímeros plásticos. Su mayor desafío fue incorporar esta tecnología sin afectar los procesos de producción ni el resultado final de los diferentes productos, manteniendo la misma apariencia y resistencia, pero inhibiendo el desarrollo de microorganismos.

Es así como nace en el año 2007 Copperprotek, empresa nacional creada por los profesionales Raúl Molina y Javier Lavín, quienes gracias a sus conocimientos en el rubro, crearon esta micropartícula de cobre, la cual puede incorporarse en una gama amplia de polímeros plásticos, entregándoles las cualidades biocidas del mineral.

“Creamos una micropartícula única en el mundo, revolucionando industrias como la de los pañales, packaging de alimentos y mascarillas”, comenta Raúl Molina, gerente Comercial de Copperprotek, quien agrega que “la micropartícula está compuesta de cinco estados distintos Cu+2, lo que nos permite modificarla para distintas condiciones de producto, para alta o baja disociación, Ph y temperatura”.

De esta manera, la tecnología patentada por los profesionales entrega a polímeros plásticos una alta capacidad de inhibición del desarrollo de virus, bacterias y hongos, lo que reduce la transmisión y contaminación cruzada; características que cobran relevancia considerando la mayor preocupación por enfermedades contagiosas en el país y el mundo.

Sumado a ello, la empresa destaca que en el rubro de la alimentación la tecnología puede estar en todo el packaging y dar una protección total, o incorporarse sólo en las micro capas interiores de cada envase para entregar un resguardo directo y seguro al producto en todo momento. Así, es posible aumentar la vida útil de los productos y agregar valor.

Las proyecciones

Dado que esta innovación tiene la capacidad para reducir virus como el H1N1, y controla un espectro amplio de bacterias, incluyendo aerobios mesófilos, staphylococcus aureus y escherichia coli; el alcance que podría tener este emprendimiento podría ser de alto interés por parte de grandes industrias.

Raúl Molina explica que hoy se encuentran “ad-portas de estar en las góndolas de supermercados con su producto en el packaging de una empresa relevante de cecinas, lo que le permite reducir el uso de preservantes y extender la vida útil en más de un 70%. Esto genera considerables ventajas en su operación y manteniendo las cualidades del producto de manera satisfactoria por más tiempo”.

Sumado a ello, el ejecutivo adelanta que también están trabajando junto a uno de los líderes mundiales de pañales, con el objetivo de “revolucionar” esta industria. “Pañales con nuestra micropartícula serían capaces de reducir las infecciones urinarias y escaras. Un concepto bastante novedoso para esa industria altamente comoditizada”, añade.

Sus proyecciones son amplias considerando que la tecnología destaca por crear partículas con diferentes combinaciones para distintos usos y aplicaciones. Sin embargo, como toda innovación tecnológica, existen ciertos inconvenientes a los que Copperprotek debe enfrentarse.

Raúl Molina señala que una de ellos es que al ser una empresa B2B que trabaja en la industria de los plásticos, deben “tratar con las empresas masivas con filiales en todo el mundo, donde las decisiones son más lentas y toma tiempo poder llegar a la persona indicada”.

¿Cómo ha sido su experiencia hasta el momento? “Hasta ahora siempre hemos tenido muy buena llegada, ya que nuestra tecnología puede agregar valor, pero una vez dentro la navegación interna no es tan rápida como nos gustaría”, detalla el gerente Comercial de Copperprotek, quien confía en el desarrollo del proyecto y en su revolucionario objetivo.