Revista Nueva Minería

En medio de la pandemia, en la minera Kinross destacan que han podido consolidar sus planes, generando procesos más eficientes a través de una disciplina financiera, lo que se traduce en un ahorro que la compañía ha calificado como “importante”.

Por Daniela Tapia
Revista NME
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“Tenemos una cartera de proyectos de inversión a 2029 por más de US$74.000 millones. Esta cifra significa un aumento de US$1.500 millones respecto del catastro de 2019 de Cochilco”, dijo el exministro de Minería, Baldo Prokurica, el año pasado, confirmando así que la minería chilena sigue siendo atractiva para los inversionistas nacionales y extranjeros.

Pero en tiempos de pandemia, esta noticia cobra aún más relevancia para las compañías mineras que han debido sortear los efectos de la contingencia sanitaria y mantener su continuidad operacional.

En este escenario, la minera canadiense Kinross ha hecho hincapié en que la pandemia del Covid-19 no ha afectado significativamente la planificación minera para el proyecto de reapertura de La Coipa, situado en la Región de Atacama.

Es más, -plantean en la firma-, producto de esta planificación la dotación aumentó, mientras que el funcionamiento en la faena se guió bajo los protocolos sanitarios correspondientes, siguiendo las recomendaciones de las autoridades de salud.

En términos financieros, en tanto, destacan que han podido consolidar sus planes, generando procesos más eficientes a través de una disciplina monetaria, lo que se traduce en un ahorro que la compañía ha calificado como “importante”.

Así lo ha sostenido el CEO y presidente de la minera, Paul Rollinson, quien señaló que a nivel global la posición financiera de Kinross Gold es sólida y robusta, capaz de soportar de buena manera la situación mundial de la pandemia, concentrando el enfoque en sus principales prioridades.

“Nuestra preocupación es que nuestros trabajadores regresen a casa sanos y salvos, ya que para Kinross el cuidado de las personas y sus colaboradores es un valor fundamental”, manifestó el ejecutivo en una oportunidad.

La Coipa

Dentro de los hitos que la compañía releva destaca que en febrero de 2020 se anunció la reapertura de La Coipa. La faena ya contaba con un capital activo, como el campamento, oficinas, Truck Shop, equipos CAEX y planta de procesamiento, principalmente.

Y gracias a su desempeño, en Kinross dicen que se sienten optimistas por los buenos resultados que han tenido.

“El equipo de trabajo ha demostrado un gran compromiso y capacidad de reacción y resiliencia, lo que ha permitido que nuestra operación en Chile se posicione de forma favorable frente a nuestros inversionistas”, comentó la empresa.

En relación a los desafíos y proyecciones trazadas, en la canadiense plantean que además de los trabajos asociados al cumplimiento de sus compromisos, próximamente comenzarán con el reacondicionamiento de la planta de procesamiento, la cual contemplará la incorporación de un nuevo equipo de trabajo y de las respectivas empresas colaboradoras que apoyarán este proceso.

Una vez finalizado el proyecto de reacondicionamiento de la planta, en la compañía esperan que la operación del proyecto La Coipa Fase 7 se inicie en el primer semestre del 2022, de acuerdo a lo estipulado en el anuncio de reapertura en 2020.

Lobo Marte

Otro de los proyectos que posee Kinross Chile es Lobo Marte, el cual fue adquirido por la minera en 2009 y está ubicado en la franja de Maricunga, a 160 kilómetros al Este de Copiapó.

Según el Estudio de Alcance completado en 2019, la iniciativa posee más de 7 millones de onzas de oro, recursos minerales medidos e indicados y con una ley media de 1,2 gramos por toneladas.

“El Estudio de Alcance contempló que el sitio comience su producción una vez finalizada la vida operacional del proyecto La Coipa. La estimación inicial de capital es de US$750 millones (+/-20%)”, según publicó la empresa.

En cuanto a los resultados del estudio de pre factibilidad de Lobo Marte que se anunciaron en julio de 2020, se estimó una vida útil total de la producción de la mina de aproximadamente 4.5 millones de Au oz. durante una vida útil de 15 años.

De tomarse una decisión de desarrollo positiva, sostienen en Kinross Chile, se espera que la construcción del proyecto comience en 2025, y la primera producción se estima en 2027. En tanto, se prevé que la minera finalice el estudio de factibilidad en el cuarto trimestre de este año.