Campamentos mineros: Hacia las cinco estrellas

28 diciembre, 2022
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Estos complejos pueden seguir optimizando su propuesta de diseño y montaje, reforzando la sustentabilidad y el confort, además de nutrirse de la tecnología digital, según los expertos.

Por Marina Parisi
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Codelco no tenía tiempo que perder. Corría mayo del 2021 y debía levantar rápidamente un campamento para albergar a 1.400 trabajadores, en el marco de su proyecto Rajo Inca y que apunta a la ampliación y dar continuidad a su operación El Salvador.

Dado que el nuevo campamento estaría ubicado muy cerca de la ciudad de El Salvador (sector precordillerano de la Región de Atacama), éste debía levantarse sin alterar la normalidad de los habitantes de la zona. Y lo que era tan o más importante, sin impactar en el medio ambiente.

“Era un importante desafío instalar un campamento tan grande, en un acotado plazo de tiempo. Además, teníamos que respetar restricciones en el horario de trabajo, emisión de ruido, alojamiento del personal de construcción y sustentabilidad ambiental”, recuerda Rodrigo Prado, gerente general de Tecno Fast.

Pese a todas estas limitaciones, el proveedor logró entregar el proyecto en seis meses. Así, el campamento de Rajo Inca quedó compuesto por 462 módulos en un terreno de 17.000 m².

“Se optimizaron los costos de operación, gracias a que en el diseño incorporamos sistemas eficientes de iluminación, climatización y de ahorro en consumo de agua”, describe el ejecutivo. “Por lo que su impacto ambiental es mínimo”, prosigue.

Aplicando inteligencia artificial

La empresa no solo se encargó de fabricar y montar la nueva infraestructura. Además, asumió la administración del nuevo complejo, a través de una plataforma de inteligencia artificial de desarrollo propietario, llamada Tecnobooking.

La herramienta se encarga de administrar y automatizar en tiempo real todas las variables al interior del campamento. Desde los turnos (14×7, 10×10, 5×2), roles (gerente, supervisor, trabajador), distribución de edificios, pabellones y pisos hasta la disponibilidad y asignación de camas.

“De esta forma, contamos con información centralizada que permite gestionar eficientemente la reserva de habitaciones, junto con la alimentación, mantención y aseo”, enfatiza Prado. “De hecho, el control de acceso al campamento, dormitorios y comedores está 100% automatizado gracias a esta tecnología”.

Esta última además optimiza el uso de las instalaciones sin desperdiciar recursos, asevera el ejecutivo, “reduciendo costos en el uso de materiales y en el consumo energético. Este ahorro puede llegar a ser entre el 10% y 15%”.

Cabe destacar que Codelco solicitó al proveedor ampliar la construcción original del campamento, “el que ahora totalizará 563 módulos en casi 20.900 m²”, adelanta Prado.

Grandes ahorros en traslados

Sin embargo, los campamentos no son exclusivos de la actividad minera. El vertiginoso desarrollo de nuevos proyectos de energías renovables, alejados de los centros urbanos, también obliga al sector a implementar dichas infraestructuras.

Es el caso del parque eólico Horizonte de Colbún, emplazado a 70 kilómetros al noreste de Taltal (Región de Antofagasta). A la fecha este desarrollo eólico en construcción es uno de los más importantes del país, con una potencia de 607 MW y 132 aerogeneradores, que suministrará energía a más de 700 mil hogares.

Pero, como suele ocurrir en todos los grandes proyectos, éste debía resolver un atasco para su exitoso avance. “Era vital alojar a los trabajadores cerca del parque eólico, ya que los tiempos de traslado desde sus casas hasta el proyecto eran demasiado extensos y agotadores”, comenta Macarena Andrade, gerente comercial de Promet.

De esta forma, el proveedor se encargó de todo: desde la gestión de aprobación de los permisos, precomisionamiento y comisionamiento hasta el diseño con modelamiento BIM y construcción del campamento con características de hotel para 1.200 personas. Este no solo incorpora los servicios básicos, también cuenta con áreas especiales de recreación y seguridad de los trabajadores.

“El campamento incluye casino, sala de recreación, de primeros auxilios, una multicancha y una planta de tratamiento de aguas para 1.200 personas”, grafica la ejecutiva. “El proyecto totalizará 10.256 m² de edificios dormitorios y 2.772 m² de edificios auxiliares, además de contemplar 1.200 camas”.

Tecnologías sustentables

En el caso de la minería en Chile, la mayoría de las operaciones se ubican en sectores remotos y cordilleranos, razón por la cual se diseña y fabrica utilizando estructuras modulares, explica Andrade. “Estas representan un ahorro del 30% frente a la construcción con estructuras tradicionales”.

Hasta aquí pareciera que la edificación de campamentos ha avanzado lo suficiente, comparable con una infraestructura hotelera. Sin embargo, aún quedan importantes aspectos por zanjar, advierte Eugenio Correa M, gerente general de Correa 3 Arquitectos y consultor experto en minería, patrimonio y energías renovables.

“Hay que mejorar la calidad de estas instalaciones. Las exigencias son mayores que antes, dado que hoy nadie está dispuesto a dormir con más de dos personas, en una misma habitación. La pandemia transformó rápidamente el diseño y la infraestructura para campamentos, habilitando dormitorios individuales”, ejemplifica el experto.

Otros desafíos ineludibles son los relacionados con la transición energética y el mayor uso de energías renovables, indica Correa. “Hoy las tecnologías sustentables son una realidad económicamente competitiva y debemos aprovecharlas”.

Clima y exteriores

Se debe optimizar los costos de construcción, mediante diseños y especificaciones técnicas más eficientes, afirma Correa, “junto con mejorar la aislación acústica y térmica en muros y techos”.

En este punto, no podía estar más de acuerdo Eugenio Garcés Feliú, profesor honorario de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos de la Universidad Católica. De hecho, el académico pone especial énfasis en la relación ambiente-infraestructura.

“Es necesario trabajar mucho más los aspectos ambientales que caracterizan a estos complejos, priorizando un diseño técnico y materiales a utilizar en función de las condiciones climáticas del desierto: sequedad del aire, calor excesivo de día, frío intenso de noche y gran presencia de polvo”, grafica Garcés.

¿Conclusión?, es mucho lo que se puede avanzar. El objetivo es que al final del día, el trabajador sienta un profundo deseo de regresar a su hotel.

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