Acuñadura mecanizada: proceso que salva vidas
“La acuñadura mecanizada es la pieza clave de un proceso seguro de fortificación y producción de minería subterránea, donde el mensaje de término es que la acuñadura mecanizada salva vidas”.
Por Claudio Muñoz, product manager
Ferrostaal Equipment Solutions
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El proceso productivo minero sustenta su desarrollo en un sinnúmero de etapas especializadas en las que intervienen trabajadores, equipos e infraestructuras altamente valiosas e intensivas en capital que requieren de extremo cuidado para el buen logro de los objetivos. Según estadísticas de Sernageomin, en 2021 el 20% de los accidentes fatales se produjeron por caída de roca, y aproximadamente el 40% de los accidentes en minería subterránea son ocasionados por desprendimiento de material o roca, tristemente todos evitables.
Así, uno de los principales riesgos en las operaciones mineras es particularmente la caída de roca o desprendimiento de planchones desde el techo o cajas de las galerías o túneles de acceso y producción, situación a la que se ven expuestos todos los trabajadores de la mina. Entonces, ¿cómo controlar los riesgos? Con procesos de fortificación y acuñadura, que consisten en un programa de seguridad y estabilización clave para la continuidad operacional de la mina.
La acuñadura es la operación de desprender oportunamente planchones o material rocoso suelto susceptible de caer desde cajas y techo del túnel, evitando que caigan imprevistamente y se provoquen accidentes, lesiones o daños a personas, equipos o infraestructura crítica. La acuñadura se caracteriza por ser un proceso complejo, altamente especializado, que requiere planificación, sistematización, control y disposición, ya que se debe realizar todas las veces que sea necesario. Es una etapa clave para lograr una sólida fortificación. Con el desarrollo industrial y nuevas tecnologías, se observa cada vez menos acuñadura manual, siendo hoy la práctica más segura y recomendada la mecanizada.
¿Por qué es tan necesaria?
Al enfrentar una excavación, la masa rocosa en el interior del cerro soporta grandes presiones en todas las direcciones, pero se mantiene estable debido al equilibrio de estas fuerzas ejercidas permanentemente por el cerro. Sin embargo, al extraer material o gran volumen de roca para formar un túnel, por ejemplo, se crea una cavidad en el cual las caras libres quedan sometidas a fuerzas que ahora no tienen oposición y convergen hacia el espacio vacío. Esto provoca fracturas y grietas en el techo y las cajas, generando rocas sueltas o zonas débiles que posteriormente se soltarán y caerán, representando el principal riesgo si es descontrolado.
Para evitarlo, como se ha planteado, la acuñadura debe estar siempre presente en el desarrollo de una excavación en roca. Nunca un equipo de producción debe prescindir de la acuñadura, ya que el movimiento y ajuste del cerro hace variar la estabilidad de la mina, y lo que en alguna oportunidad quedó bien fortificado eventualmente se puede soltar, haciendo de la acuñadura una función esencial y de la acuñadura mecanizada la forma de hacerlo de manera rápida y segura, sin exponer a los operadores.
Con relación al estado de la situación en Chile, país que siempre ha estado a la vanguardia en cuanto a seguridad minera, encontramos que en importantes operaciones como Minera Candelaria, Codelco DET, Atacama Kozan y PuCobre, entre otras, no se permite el ingreso de equipos, ni personal, a menos que el lugar se encuentre correctamente acuñado, esto garantiza que no habrá desprendimientos inesperados, ni riesgos no controlados.
La cultura de acuñar todas las nuevas galerías y frentes que se abren, es un ejemplo de compromiso con la seguridad que se exporta a los países de la región que cada vez con más frecuencia incorporan este tipo de equipos a sus operaciones, posicionando a Chile como uno referente cuando se trata de acuñadura mecanizada y seguridad minera.
La importancia de la innovación
La innovación es un punto que constantemente las empresas que proveen este tipo de equipos están intentando incorporar a sus nuevos modelos, con especial enfoque en la seguridad, con cabinas más seguras y confortables para el operador. Un ejemplo concreto respecto a este punto es el diseño del nuevo acuñador de la fábrica alemana Hermann Paus Maschinenfabrik, el PScale 8T, que incorporó a su equipo una cabina inclinable, lo que permite que el operador pueda estar trabajando en su labor mirando directamente al punto donde está acuñando, reduciendo así la fatiga, factor muy relacionado con la accidentabilidad laboral.
Además de ser un equipo tele operable y que cuenta con un sistema de supresor de polvo, al mismo tiempo mejora la visibilidad y logra hacer precipitar las partículas de polvo que se generan en la operación, reduciendo así el aporte de agentes contaminantes al ambiente de la mina. Empresas proveedoras han entendido el desafío y hoy la oferta de equipos en Chile es amplia y variada, pero pocas empresas logran agregar valor con integralidad de servicio, stock y un real y eficiente acompañamiento de sus clientes. El objetivo está en superar las expectativas y transformar ideas en realidad, donde la acuñadura mecanizada es la pieza clave de un proceso seguro de fortificación y producción de minería subterránea, donde el mensaje de término es que la acuñadura mecanizada salva vidas.
