Enami: Para buenos proyectos siempre hay financiamiento

25 agosto, 2014
Ronald Guzmán_foto

Ronald Guzmán V, profesor Departamento Ingeniería de Minería, Pontificia Universidad Católica e Chile, PUC.

Ronald Guzmán V, profesor Departamento Ingeniería de Minería, Pontificia Universidad Católica e Chile, PUC.

Ronald Guzmán V, profesor Departamento Ingeniería de Minería, Pontificia Universidad Católica e Chile, PUC.

La situación actual de la Enami respecto a su problema financiero no es novedad, lo que si es nuevo es que ocurra en un período de precios altos de los metales. Sobre la base de su rol de fomento a la mediana y pequeña minería, más que preocuparse del saneamiento financiero y cubrir los costos de la empresa, se debe analizar la estrategia corporativa y reformular la manera sobre la cual opera.

Para el rol económico y social que significa fomentar la mediana y pequeña minería en Chile, es imprescindible dar a Enami un sustento en el largo plazo, mediante una reformulación de su estrategia, varias veces comentada y de cierta manera aceptada por la industria minera, respecto al apoyo que brinda a medianos y pequeños productores. Así, el Estado nuevamente debe converger un plan de desarrollo que signifique para Enami focalizar sus esfuerzos en donde corresponde.

Tomando lo anterior surgen las siguientes inquietudes: ¿Qué rol juega una fundición como medio de fomento a la minería en esta escala?, ¿cuáles son los activos que posee Enami en términos de propiedad minera y cómo se pueden rentabilizar?, ¿los modelos de negocio de proyectos con privados como Delta y el nuevo proyecto Pampa Camarones, están basados en una relación ganar-ganar? Sobre la base de esta última pregunta: ¿gana la mediana y pequeña minería?

La actividad minera en su definición mas fundamental basa su valor en el yacimiento y todos sus atributos técnicos y económicos, en el lugar donde esta emplazado. De esta manera, es ahí donde debe poner todos los esfuerzos esta entidad; generando una estrategia que permita poner en manifiesto todo el potencial de recursos minerales que existen a lo largo de todo Chile (no sólo cobre y oro), uniendo esfuerzos con Sernageomin para la actividad geológica propiamente tal, y apalancando recursos financieros con privados para todo el trabajo más concreto de exploración (sondajes), que es la manera en la cual todos los medianos y pequeños productores deberían declarar el atractivo de su negocio, y si es a través de los códigos internacionales, mucho mejor.

No obstante, el rol de Enami no debería terminar ahí, ya que el negocio de explotación y procesamiento de minerales se basa en reservas y no recursos, por lo que en esta etapa es importante generar alianzas con empresas del mundo financiero o de capital de riesgo, a objeto de plantear el negocio productivo sobre la base de riesgos compartidos (mucho más acotados), comercializando minerales y/o productos más elaborados, ya que es en este segmento donde la diferenciación de productos tiene mucho sentido.

Todo lo que hoy se discute en forma parcelada sobre la minería (mercado de capitales, sustentabilidad, entre otras aristas) se puede converger a través de Enami, y para eso siempre habrá financiamiento.

Por Ronald Guzmán V, profesor Departamento Ingeniería de Minería, Pontificia Universidad Católica de Chile, PUC.

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