Pese a reclamos, ministro de Energía descarta retomar la hora de invierno
Estudio de la U. de Chile, esgrimido por el Ministerio de Energía a favor de un horario único de verano, sin embargo, advierte que los tardíos amaneceres invernales “afectarían seriamente el ritmo de la población”.
-¿Le gustaría volver a la hora de invierno?
“¡Por favor! Hasta a nosotros nos cuesta venir a trabajar. Muchas niñas viven en el campo y deben transitar por calles o espacios completamente oscuros”.
A cargo de 505 alumnas en El Monte, 50 kilómetros al surponiente de Santiago, la directora del Colegio Emelina Urrutia, Carla Herrera, ya tiene un juicio sobre el nuevo huso horario que el Gobierno definió para Chile.
Aún en las postrimerías del otoño, el GMT -3 tiene a millones de estudiantes ingresando a clases totalmente a oscuras.
“Ha sido un poco caótico en realidad. Se nota que la oscuridad les afecta a las alumnas, porque llegan más desganadas y les cuesta poner atención durante las primeras horas”, explica.
Como las de Herrera, el nuevo huso horario levanta diversas críticas. Desde apoderados hasta trabajadores de la construcción, pasando por temporeros y agricultores, las mayores quejas apuntan a traslados matutinos más riesgosos, retrasos en el inicio de jornada y somnolencia a una hora en que el cuerpo debería estar totalmente activo.
Por ahora, sin embargo, nada cambiará. Ayer, el ministro de Energía, Máximo Pacheco, enfatizó que la eliminación del horario de invierno es “definitiva”.
¿Razones? Tal como dijo en enero, cuando anunció la medida, ayer insistió en que la coexistencia de los horarios de verano e invierno -instaurada en 1970 para enfrentar una sequía- “no tiene ningún impacto en el ahorro de energía”.
Explica que la minería y la industria, que consumen dos tercios de la potencia eléctrica que se genera en el país, funcionan las 24 horas, y, por ende, son indiferentes al cambio. Y en lo doméstico, añade, si en 1970 el consumo en los hogares era básicamente para iluminación, hoy lo es para electrodomésticos, por lo que tampoco hay mayor ahorro.
Para respaldar su postura, el jueves el ministerio subió a su web dos estudios sobre el tema.
El primero, realizado en 2009 por el Instituto de Asuntos Públicos de la U. de Chile, plantea que eliminar la hora de invierno y fijar la hora oficial en GMT -3 es una solución “energéticamente óptima”, que aporta dos beneficios (ahorrar energía y evitar la adaptación del reloj biológico de las personas) y un costo: que en invierno amanecerá cerca de las 9:00 horas, “lo cual afectaría seriamente el ritmo de la población en general”.
El segundo trabajo disponible en www.minenergia.cl fue presentado en febrero de este año por el Departamento de Ingeniería Eléctrica de la U. de Santiago. Dice que los cambios de hora invierno/verano ahorran energía, pero a una escala menor (bajo el 1%) y que en ciudades como Concepción el suprimido horario invernal aumentaba el consumo eléctrico anual en 0,32%.
Al defender el GM -3, Pacheco plantea que tener más luz natural vespertina contribuye a la seguridad (“en las tardes hay tres veces más delitos que en las mañanas”), ayuda a que los escolares hagan sus tareas y permite que los adultos tengan actividades deportivas o extralaborales.
Consultado, el ministro de Energía admite haber solicitado a la Sociedad Chilena de Medicina del Sueño un estudio sobre el impacto de la eliminación del horario de invierno, pero lo atribuye solo a un monitoreo, descartando una eventual revisión.
Según Pacheco, encuestas encargadas por su cartera indican que el 67% de los chilenos apoya un horario único de verano.
Y aunque admite que el tema es “opinable”, recuerda que cualquier cambio requiere tiempo de tramitación y que, en apenas 15 días, a partir del solsticio de invierno del 21 junio, cada día tendrá más tiempo de luz natural.
Fuente: El Mercurio
