Pese a mayor precio del cobre, mineras mantienen a raya los costos de producción
Al cierre del primer trimestre, el indicador subió marginalmente, en circunstancias de que la cotización del mineral se disparó en un 51% respecto al mismo período en 2020.
La Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) elaboró el primer observatorio de costos del 2021, con los datos de las 22 principales operaciones de la gran minería del cobre, que representa el 93,6% de la producción minera al cierre del primer trimestre. Un dato clave para ese indicador tiene que ver con que en el período se vio un fuerte aumento en el precio del mineral, con un promedio de US$ 3,85 entre enero y marzo, pero rompiendo varias veces la barrera de los US$ 4, llegando a marcas históricas en más de nueve años.
En ese contexto, la gran minería del cobre logró mantener a raya los costos de producción (C1), indicador de la posición competitiva de corto plazo que se utiliza como benchmark de gestión entre países, operaciones, grupos corporativos, etc., y que al cierre de marzo (último dato disponible) se ubicó en 126,1 centavos de dólar por cada libra, lo que representa un alza marginal respecto a los 121,8 centavos vistos en el mismo período en 2020, en donde el precio del metal rojo era de un 51% menor.
El efecto negativo de la variación informada por Cochilco es atribuible mayoritariamente a la disminución del 10% en el valor del tipo de cambio que se vio en el período. Por otro lado, también hubo un efecto positivo atribuible a menores precios de insumos clave para la producción del metal, donde se incluyen el ácido, la energía eléctrica y combustibles, entre otros, a lo que se suma el mayor precio de subproductos, como el molibdeno, la plata y el oro. “El control y gestión de los costos es una herramienta muy desarrollada en las operaciones de la gran minería.
Hasta el momento no se visualiza una escalada en los costos como la experimentada durante el superciclo de los commodities, cuando los costos C1 subieron 231% en un período de 9 años y superaron los 155 centavos de dólar”, aseguró el vicepresidente ejecutivo de Cochilco, Marco Riveros. De hecho, la contención de costos ha sido una de las principales metas de la industria local desde hace ya varios años, y prueba de esto es que en 2020 se alcanzó el valor más bajo de la década, con 122 centavos de dólar por cada libra, completando cuatro ejercicios consecutivos en el que se registró un retroceso en los costos de producción.
En el detalle del estudio se revela eso sí que 12 fueron las operaciones que aumentaron sus costos, mientras que 10 los redujeron, aunque el dato preocupante sigue siendo que solo hay tres faenas de la industria local que se encuentran en el primer cuartil de costos; cuatro en el segundo; tres en el tercero, y doce en el cuarto. Respecto al resto del año, desde Cochilco señalan que, de concretarse un alza en los costos, sería marginal, ya que todo parece indicar que el valor del tipo de cambio promedio se mantendría en los niveles observados a la fecha y similares a los del año pasado, por lo que no se visualiza una presión determinante en los costos atribuible a dicha variable.
“Como contrapartida, de mantenerse el alza en el valor de los subproductos como el molibdeno, oro y plata, presionarían a la baja los costos. Otro aspecto tiene relación con la evolución negativa del precio de los combustibles. Durante el primer semestre del año, el petróleo sufrió una fuerte alza que se detuvo en agosto”, añade Riveros. Con todo, desde la entidad estatal reconocen que la gran cantidad de negociaciones colectivas que se han desarrollado durante el año, y que aún restan por cerrarse, son un aspecto a tener en consideración en la evolución de los costos en el corto plazo.
En esa línea, cabe recordar que durante este año se ha visto de vuelta la entrega de grandes cifras en beneficios para evitar las huelgas, estando muchas veces por sobre los $20 millones por cada trabajador. “Una paralización de actividades producto de una negociación colectiva trae consigo una menor producción que impacta negativamente en los costos operacionales”, puntualiza Riveros.
Fuente: El Mercurio
