La nueva ruta del proyecto Candelaria

28 agosto, 2014
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Ad portas de la expiración de su vida útil en 2017, la mina Candelaria se prepara para dar un nuevo paso: extender sus operaciones hacia el 2030. Una iniciativa que contempla una inversión del orden de los US$ 400 millones, a ejecutarse entre 2015 y 2017, y que promete revitalizar la cartera de inversiones mineras.

Daniela Tapia – Revista Nueva Minería y Energía
 

Tierra Amarilla se ubica unos 20 kilómetros hacia al sureste de Copiapó. Una pequeña ciudad caracterizada por una larga historia minera situada cerca de importantes yacimientos de cobre, entre los que destaca mina Candelaria.

Descubierta en 1987 como un depósito de cobre, oro y óxido de hierro, no comenzó a operar sino hasta 1993. En poco más de dos décadas, ha anotado importantes hitos como la certificación ISO 14001 que logró gracias a sus sistemas de gestión ambiental, convirtiéndose en una de las primeras instalaciones mineras a nivel mundial en conseguir este objetivo.

Considerado un yacimiento ancla de la Región de Atacama, ahora está dando un nuevo paso hacia su continuidad operacional. Es así como en 2013 la compañía, controlada en un 80% por Freeport-McMoRan y 20% por Sumitomo, ingresó al Servicio de Evaluación Ambiental de Atacama el Estudio de Impacto Ambiental, EIA, para extender las operaciones de mina Candelaria hacia el 2030.

Un proyecto que en la firma minera califican de prioritario dado que la actual vida útil de la mina expira en el año 2017. ¿El objetivo? Ampliar el período de operación de la faena gracias al aumento de nuevas reservas ya identificadas.

En términos concretos, el proyecto Candelaria 2030 incluye la construcción de un nuevo tranque de relaves dentro de su propiedad, así como la reubicación de algunas líneas de transmisión eléctrica y caminos, los que son necesarios para la continuidad de sus operaciones.

Las primeras líneas de Candelaria 2030

Dentro de sus principales características está la ampliación del rajo para explotar nuevas reservas por 200 millones de toneladas aproximadamente. Esto, con el fin de mantener el ritmo de extracción de material (estéril y mineral) aprobado, de 320.000 tpd, y con una tasa de producción promedio en la vida del proyecto de 75.600 tpd con un máximo de 90.000 tpd.

Pero la construcción del proyecto se iniciará una vez obtenida la aprobación ambiental y sectorial, que esperan tener a fines de este año, mientras que su puesta en marcha está programada para el 2017.

El capital humano también representa un insumo clave para el desarrollo del proyecto. Es así como en su etapa de construcción demandaría una fuerza de trabajo en promedio de 970 personas, con un máximo de 1.700, en tanto que ya en actividad la dotación prevista ascendería a 1.200 trabajadores propios y 1.400 contratistas.

Con respecto a los depósitos de estériles Norte y Nantoco, el proyecto contempla el aumento en su capacidad de almacenamiento en unos 610 millones y 140 millones de toneladas, respectivamente, abarcando un área adicional de aproximadamente 347 hectáreas entre ambos.

También considera la construcción de un nuevo depósito de relaves -Los Diques- con capacidad para 600 millones de toneladas, con una superficie aproximada de 690 hectáreas.

En lo referente al suministro hídrico, se construirá un nuevo acueducto de 500 l/s, paralelo al existente y con las mismas características. “De esta manera, se conformará un sistema de respaldo al actual, con el fin de dar continuidad al envío de agua industrial a la planta de procesos”, señalan en la firma minera.

Una iniciativa que, sin duda, le da aires de tranquilidad a la industria. Es que de la cartera estimada originalmente de proyectos mineros por US$ 110.000 millones -en la cual US$ 43.600 millones están detenidos o en revisión-, el 30% está radicado en la Región de Atacama. Una zona definida como una de las capitales mineras del país, y que una vez más verá nacer a otro de sus frutos mineros.

La ficha del proyecto Candelaria 2030

Ubicación: Se ubica a unos 22 kilómetros al sureste de Copiapó, en la comuna de Tierra Amarilla, en la Región de Atacama.

Dueño: Compañía Minera Candelaria, mayoritariamente de propiedad de Freeport-McMoRan Copper and Gold Inc. (80% Freeport-McMoRan y 20% Sumitomo).

Producción anual estimada: Tasa de producción de 90.000 tpd con un promedio estimado durante la vida útil de 75.600 tpd, manteniendo en la mina el ritmo de extracción de material (estéril y mineral) aprobado de 320.000 tpd, aproximadamente.

Inversión: US$ 400 millones aprox.

Estado actual: El Estudio de Impacto Ambiental correspondiente fue presentado en septiembre del año pasado. En la minera esperan contar con su aprobación por parte de la autoridad para fines de este año.

Obras importantes: Entre las obras a realizar destaca la ampliación y profundización del rajo actual; el aumento en la capacidad de almacenamiento de los depósitos de estéril Norte y Nantoco y la habilitación de un nuevo depósito de relaves. Además, se contempla la construcción de un nuevo acueducto desde el sector Bodega a la faena minera; obras en la planta de procesos y en el sistema de suministro y distribución de energía eléctrica, entre otras.

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