Crecen expectativas por reunión de la OPEP este jueves

25 noviembre, 2014
petroleo

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La división de los países miembros ante la estrategia para enfrentar la caída del precio del petróleo ha destapado un tensión interna en torno a si recortar o no la producción de crudo. Sea cual sea la decisión de este jueves, se espera que conlleve una alta volatilidad al mercado.

La caída de los precios del crudo en un 30% en los últimos cinco meses, a alrededor de US$80 el barril, tiene a los 11 miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) divididos. ¿Recortarán o no la producción para apuntalar los precios? Esta es la pregunta que conduce la próxima reunión del grupo este jueves, en la capital austriaca, Viena.

Y es que a pesar de que el precio actual del barril es inferior al necesario para equilibrar el presupuesto de muchos de los productores miembros, ninguno de los países clave del Golfo está interesado en recortar el suministro – que hoy está en alrededor de 1 millón de barriles diarios por sobre la cuota- para sacar a los competidores estadounidenses del mercado.

Incluso, los países ricos del grupo, como Arabia Saudita, pueden beneficiarse con un período de precios más bajos del petróleo en el largo plazo, ya que le daría impulso a la demanda, según la consultora Capital Economics.

Pero otros miembros con una situación económica crítica, como Venezuela, no pueden pagar la sobreoferta y la caída de los precios perjudicará aún más a la ya atribulada economía. Es por esto que el gobierno de Nicolás Maduro está buscando alianzas fuera de la OPEP, como en Rusia.

Ambos países son los dos más afectados por el petróleo más barato. Mientras Venezuela atraviesa por una crisis económica y política, Rusia está sufriendo los efectos de las sanciones y de la fuga de capitales.

Según Goldman Sachs, un barril a US$75 será la media durante los tres primeros meses del próximo año, debido principalmente al auge de la producción de shale gas en EEUU y a la caída de la demanda de Europa y China.

Aunque no hay señales claras sobre qué decisión se va a tomar, los 20 analistas encuestados por Bloomberg están perfectamente divididos, con la mitad de ellos previendo que la OPEP reducirá la oferta para frenar una caída de los precios, que han alcanzado su mínimo en cuatro años, mientras que la otra mitad no espera cambios.

Los dos escenarios

La caída de precio del petróleo ha aumentado las especulaciones sobre una reducción del suministro, pero que conlleva el riesgo de que la OPEP pierda más cuota en el mercado, en favor de los proveedores rivales, como EEUU.

Gareth Lewis, analista de este commodity de BNP Paribas, dice desde Londres que es probable que la OPEP recorte entre un millón a 1,5 millones de barriles diarios.

Los analistas coinciden en que el recorte de la producción no tendría un impacto real en los precios. Giles Keating, presidente del Grupo Global de Economía y Estrategia de Credit Swisse, dice que es posible que anuncien una modesta reducción en la producción, lo que afirmaría un poco los precios, “pero la habilidad de la OPEP para generar un impacto en el mercado del petróleo es limitado y el efecto no será duradero”.

Gustavo Coronel, ex directivo de la petrolera estatal PDVSA, explica que, incluso si se redujera el millón de barriles que hoy se generan por encima de la cuota de producción, que es lo máximo que Venezuela puede aguantar, no tendría mayor impacto en los precios. “Tendrían que rebajar dos millones de barriles y eso va a ser difícil de lograr”, dice.

Para Capital Economics, una eventual reducción de la producción sería el resultado de la caída de la demanda de crudo, antes que un esfuerzo de la OPEP para sostener los precios. “Dudamos de que el gobierno saudí sea lo suficientemente “altruista” como para reducir la producción exclusivamente para el beneficio del resto del grupo. La consultora explica que si llegara a recortar la producción en 2 millones de barriles diarios para compensar una mayor producción de Irán e Irak, esto le costaría alrededor de US$160 millones al día en pérdidas de ingresos, a precios actuales. Los precios del petróleo tendrían que subir a niveles mucho más altos que en la actualidad con el fin de beneficiar al reino saudí”.

La consultora británica no espera que el grupo pueda evitar que el precio del barril Brent caiga a US$70 a finales de 2016.

Otra posibilidad es que en la reunión no se tome ninguna medida y se permita la caída de los precios para impedir el crecimiento de la producción de EEUU, pero esta debilitaría las finanzas de los países más pobres del grupo.

El mercado evalúa de una forma negativa el que la OPEP no haga nada.

Para BNP Paribas, el hecho de que la OPEP no recorte la oferta y permita que el precio del petróleo caiga, y eventualmente desplace al productor estadounidense, es una muestra de que la OPEP ha perdido su papel y el control sobre los precios.

Los analistas concuerdan que, independientemente del resultado, los precios serán altamente volátiles. “Es particularmente interesante que la decisión de la OPEP se revele en Acción de Gracias, cuando los mercados de EEUU están cerrados y la liquidez es baja. La acción del precio puede resultar altamente volátil”, afirma un informe de BNP Paribas.

Fuente: Pulso

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