Revista Nueva Minería

La principal organización de la faena ubicada en la Región de Antofagasta informó que las paralizaciones de advertencia se realizarán a partir del 12 de septiembre. La compañía insiste en la ilegalidad de la acción y de las peticiones de los trabajadores.

Con un aplastante respaldo de parte de los socios del sindicato N° 1 de Minera Escondida, ayer se confirmó la paralización de la faena minera más grande del mundo, ante las supuestas dificultades en temas de seguridad que estaría enfrentando la mina, lo que, en todo caso, fue descartado de plano por la compañía.

Según informó el sindicato, la propuesta de la dirigencia, de realizar detenciones acotadas, contó con el 96% de los votos, es decir, casi 2.200 trabajadores. “A contar de este momento nuestros planes de contingencia se activan, tanto para preparar en una primera acción las paralizaciones por turnos y luego la huelga indefinida. Nuevamente exhortamos a la empresa a que busque solución a nuestros justos reclamos y quejas. Ella es la que tiene toda la responsabilidad por resolver esta situación”, se explica en el comunicado de la organización.

Sin embargo, existen otros factores detrás de esta disputa y tienen que ver con una serie de puntos que el sindicato reclama a la empresa, ante supuestos incumplimientos de las condiciones que fueron pactadas en la negociación colectiva de agosto de 2021, donde se llegó a un acuerdo a cambio de beneficios por $24 millones.

Desde la organización apuntan en sus comunicados, además de a incumplimientos, a cambios en los reglamentos, por ejemplo, en el proceso de autotesteo que se ha implementado en la minera como medida de prevención de contagios de covid-19. No obstante, en las reuniones sostenidas con la administración de Minera Escondida —operada por la angloaustraliana BHP— también se solicita un bono excepcional de $3 millones.

Cabe recordar que el sueldo de los trabajadores de la minera puede llegar a estar compuesto en hasta un 60% por bonificaciones variables, las que se pagan de manera mensual, trimestral y anual, remuneraciones que están asociadas a ciertos parámetros de seguridad y producción que van definiendo de manera proporcional los montos a entregar. Estos pagos se habrían visto afectados ante los menores niveles de producción que ha tenido la minera.

Ante esta situación, la compañía decidió recurrir a los tribunales, en donde presentó una demanda de mera certeza, con la que se busca que sea un juez quien determine si existen o no los incumplimientos que reclama el sindicato respecto del contrato colectivo.

Según conocedores de la situación, mediante esta estrategia la minera busca demostrar que se encuentra cumpliendo con sus obligaciones laborales, y que los tribunales de justicia actúen si corresponde. En esta línea, la empresa declaró que “rechaza categóricamente que se utilicen acusaciones de incumplimiento asociadas a esta materia (seguridad) para justificar una paralización que esta fuera del marco establecido en la ley ”.

En paralelo, ayer se dio inicio formal al proceso eleccionario del Sindicato N°1, que actualmente cuenta con más 2.400 socios, y que debe renovar su composición. En la instancia se espera que participen sus principales líderes actuales, como el presidente Patricio Tapia.

En el informativo interno se explica que a partir de hoy se puede inscribir los interesados a convertirse en director de la organización, plazo que se extenderá hasta el 26 de septiembre, mientras que el proceso de votación se realizará de manera digital, entre el 29 de septiembre y el 3 de octubre.

Efectos externos

Conocedores de la situación también apuntan a que la eventual confrontación también significará un dolor de cabeza para el Gobierno, por un lado, por el peso que tiene Minera Escondida en la golpeada economía nacional, y el impacto que podría tener su paralización.

A su vez, de concretarse la acción, habrá presión para el Ejecutivo ante la eventual necesidad del uso de la fuerza pública, considerando que se trataría de una detención ilegal de la faena, pese a la postura que tienen desde el sindicato.

Desde la empresa señalaron que “una acción de este tipo genera riesgos para la seguridad de las personas, compromete el resguardo de las instalaciones y afecta la continuidad operacional, lo que es perjudicial para el desarrollo económico y social de la región y el país”.

Con todo, la alerta generada por el anuncio también podría tener efectos en la cotización del mineral, considerando que Minera Escondida produce cerca de 1,1 millones de toneladas de cobre al año, siendo la faena más grande del mundo. Esto se suma a las complejidades de producción que han tenido otros yacimientos en el país.

Prueba de lo anterior es que ayer el metal rojo se cotizó en Londres en US$ 3,59 por cada libra, apreciándose un 2,28%, su mayor alza en más de un mes. Pese a esto, la principal exportación del país completa una caída acumulada en lo que va del año de un 18,4%. con un precio promedio de US$ 4,16.