Revista Nueva Minería

El grupo minero obtuvo una producción de cobre fino de 725 mil toneladas el 2018, un nuevo récord que supera en cuatro mil toneladas el máximo histórico anterior logrado en 2013.

Por Daniela Tapia

Revista Nueva Minería y Energía

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Desde el año 2013 que Antofagasta Minerals no lograba una producción récord como lo hizo el 2018 cuando alcanzó una producción de cobre fino histórica de 725.300 toneladas, cifra que se explica por una mayor producción en Minera Los Pelambres y Minera Centinela.

La producción de molibdeno también estuvo en línea con este panorama de resultados favorables, creciendo en 29,5% a 13.600 toneladas, aunque la producción de oro se vio levemente disminuida en 1,1% respecto al año anterior.

En tanto, el costo neto de caja fue de US$1,29 la libra, 3% mayor al mismo valor del año pasado. Las razones de este escenario se deben a los mayores precios de insumos críticos como el petróleo diésel, el ácido y medios de molienda, así como la entrada en operación de la nueva planta de Óxidos Encuentro en Centinela.

“Estos mayores costos fueron parcialmente compensados por los ahorros y mejoras de productividad que totalizaron US$ 184 millones el año 2018, junto con los mayores ingresos por venta de subproductos como el molibdeno y el oro”, explican en la compañía minera.

Y si bien la valla quedó alta en 2018, en la compañía ya se impusieron la tarea de superar esta meta de producción histórica durante el presente año. Por eso, las expectativas que se manejan apuntan a producir entre 750.000 y 790.000 toneladas de cobre gracias a un aumento en las leyes de los minerales en todas sus operaciones, especialmente en la línea de sulfuros de Minera Centinela.

Para los costos de producción también se prevé un 2019 favorable, ya que se estima que se mantendrán estables, con un costo de caja antes de los créditos por subproductos de US$1,70 por libra y con un costo neto de caja en US$1,30 la libra.

Con relación a los subproductos, Antofagasta Minerals estima producir entre 240.000 y 260.000 onzas de oro y 11.500 a 12.500 toneladas de molibdeno.

Asimismo, el programa de competitividad y costos, que se viene implementando desde 2014, tiene como meta lograr un ahorro de US$100 millones adicionales en el año.

Proyectos de crecimiento

Otro de los objetivos propuestos por Antofagasta Minerals es poner en marcha nuevos proyectos que contribuyan con las perspectivas de crecimiento de la compañía.

De hecho, este año ya comenzó la construcción del proyecto de Infraestructura Complementaria (INCO) de Minera Los Pelambres, con una inversión de US$1.300 millones. Una vez terminado, este proyecto aportará más de 60.000 toneladas adicionales de producción al año en promedio, además de habilitar una planta desaladora que servirá de respaldo para la operación en caso de sequía (ver crónica aparte).

Respecto a esta iniciativa, su importancia radica en que va a estar prácticamente al lado de la operación actual, por lo que como compañía se han estado preparando para enfrentar ese cambio, y por lo pronto, mantener las condiciones de una operación estable que ha estado en el primer cuartil de costos, como es el caso de Minera Los Pelambres.

En relación a la expansión de Minera Centinela, durante este año la firma ha afirmado que se continuará trabajando en estudios de factibilidad para definir la viabilidad y mejor oportunidad para construir una segunda planta concentradora. Estos estudios deberían completarse en el transcurso del año 2020.

En la mina Zaldívar (en la foto) existe un proyecto de optimización de recuperaciones, con una inversión de US$175 millones, que va a producir alrededor de 12.000 toneladas adicionales de cobre por año. (Foto: Antofagasta Minerals)

A su vez, en la mina Zaldívar existe un proyecto de optimización de recuperaciones, con una inversión de US$175 millones, que va a producir alrededor de 12.000 toneladas adicionales de cobre por año. La etapa de factibilidad se encuentra terminada, donde se asumirán los primeros compromisos con miras de aprobar el proyecto durante el transcurso de este año.

“Nuestras prioridades para este año son seguir fortaleciendo nuestro desempeño en seguridad, junto con mantener el control de costos y la confiabilidad y eficiencia operacional”, destaca Iván Arriagada, presidente ejecutivo de Antofagasta plc.

El ejecutivo además avizora buenas perspectivas para el cobre en los próximos meses, señalando que a medida que han ido avanzando las negociaciones comerciales entre China y Estados Unidos, el cobre se ha transado a precios más altos en los mercados mundiales.

“Esperamos seguir viendo volatilidad en el corto plazo, pero consideramos que los fundamentos son positivos y que el déficit de cobre en el mercado aumentará durante el transcurso de este año”, asegura el presidente ejecutivo de Antofagasta plc.