Revista Nueva Minería

Bajo el paraguas de la compañía italiana Enel, sus marcas asociadas en Chile se ajustarán a la nueva estrategia que ésta impulsará, donde el objetivo ya no estará en la construcción de centrales de energía, sino en el relacionamiento con los clientes.

Revista Nueva Minería y Energía

Daniela Tapia
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Unificar sus marcas en Chile, prescindir de sus tradicionales nombres locales como Chilectra, Endesa Chile y Enersis y que todo quede bajo el paraguas de Enel, fue el plan que la compañía italiana concretó recientemente en el país.

Este giro forma parte de Open Power, la nueva imagen que la italiana lanzó en enero del año pasado y que llegó a Chile de la mano de la innovación y los nuevos usos de la energía y las tecnologías.

Uno de los pasos más importantes para materializar esta nueva “aventura”, como la denomina el gerente general de Enel Chile, Nicola Cotugno, fue el cambio de nombre de las compañías, eliminando las marcas Enersis Américas, Enersis Chile, Endesa y Chilectra, y reemplazándolas por Enel Américas, Enel Chile, Enel Generación y Enel Distribución, respectivamente.

A comienzos de diciembre pasado se dieron a conocer estos cambios en un evento masivo que reunió a clientes y ejecutivos de la empresa. En el encuentro se lanzó la nueva estrategia de la compañía, “que apunta a abrirse a nuevas tecnologías y a nuevos usos, ampliando la oferta a nuestros clientes y brindándoles soluciones creativas, eficientes y sustentables”, comenta el gerente general de Enel Chile.

La estrategia implica un punto de inflexión de lo que fue la compañía en el pasado y lo que apuesta a ser de acuerdo al nuevo contexto mundial.

“Mediante la introducción de esta nueva marca en Chile mostramos que somos capaces de anticipar el contexto externo y tenemos una ventaja competitiva importante”, señala Nicola Cotugno.

Pero la “aventura” no es sólo esa. También quieren impulsar en el mercado local una nueva forma de negocio, donde el foco ya no estará en la construcción de centrales de energía, sino en el relacionamiento con los clientes.

Es por esto que desde la firma son enfáticos en afirmar que en Chile hay una oferta de energía muy amplia, con más y nuevos actores y nuevas tecnologías, factores que cambian el escenario.

En generación, añaden desde Enel Chile, creen que el sistema no requiere de grandes proyectos porque hay sobrecapacidad, pero eso no significa que no estén mirando nuevas oportunidades que se abran en este campo.

En materia de distribución, en tanto, reconocen que se está viviendo una importante transformación, por lo que están buscando darle nuevos usos a la energía.

De ahí que ya han instalado 50.000 medidores inteligentes, pusieron en marcha el primer bus eléctrico de Santiago, están impulsando una agenda de eficiencia energética, además de ver nuevas oportunidades fuera del área de concesión de la compañía en la Región Metropolitana como suministradores de nuevos servicios en venta de energía a clientes libres.

Focos de negocio

Hace algunas semanas el grupo Enel presentó su plan estratégico 2017-2019 el que contiene detalles de sus proyectos más relevantes. Entre las iniciativas más importantes destaca la construcción de la central hidroeléctrica Los Cóndores de 150 MW, a cargo de Enel Generación Chile, que esperan tenerla operativa en 2018.

Nicola Cotugno, gerente general de Enel Chile. (Foto: Enel Chile)

Asimismo, la firma está enfocada al negocio del gas natural, entre otros proyectos. Ya tienen instaladas 5 plantas de regasificación satelital en Talca, Temuco, La Serena, Los Andes y San Antonio, además de implementar mejoras en sus plantas “para estar a la vanguardia en materia de eficiencia y cuidado con el medio ambiente”, según destaca la propia empresa. De hecho, en la central Bocamina se está terminando un domo para techar una de las canchas de carbón, una medida que, en palabras de Enel Generación Chile, “es inédita en la región”.

Por otro lado, en el área de distribución, Enel también ve posibilidades de negocios relevantes. ¿La razón? Chile demanda innovación y soluciones para el problema de la contaminación de las ciudades y desde Enel apuestan por contribuir con calefacción eléctrica, eficiencia energética, movilidad eléctrica, medición inteligente y la instalación de paneles solares para la autogeneración (Net Billing).

“Estamos convencidos de que hoy debemos estar abiertos para resolver los nuevos y mayores desafíos del mundo. Abiertos a nuevas formas de gestionar la energía, a nuevos usos de la energía y a más colaboradores. Los cambios que queremos impulsar van en esa línea, en entregar más valor a nuestros clientes y al desarrollo del país”, plantea Nicola Cotugno, gerente general de Enel Chile.

En relación a las medidas que propone el plan estratégico de Enel Chile para los próximos tres años, en la firma también proyectan cifras de crecimiento en varias áreas del negocio.

En términos de clientes, la tasa de crecimiento se sitúa en 2,4% anual. Con respecto a energía distribuida la tasa de crecimiento promedio anual es de 2,4% y, en términos de EBITDA, ésta se sitúa en torno al 8,6% anual en los próximos tres años.

Por ahora, el foco principal está puesto en el campo de la distribución en lo que será el mayor proyecto transformador que es la digitalización de las redes y el reemplazo de los medidores tradicionales por medidores inteligentes.

La movilidad eléctrica también está entre sus prioridades. “Una apuesta bajo la cual late muy fuerte el sueño de un Santiago descontaminado y más amable”, dice Nicola Cotugno, gerente general de Enel Chile.