Sierra Gorda: Saliendo de la tormenta

2 julio, 2017
Sierra Gorda

(Foto: Sierra Gorda SCM)

Operación minera Sierra Gorda. (Foto: Sierra Gorda SCM)

No han sido años fáciles para Sierra Gorda. A su ingreso tardío al “boom del cobre” se suman los magros resultados que alcanzó en 2016. Pero la revisión del modelo de desarrollo minero del yacimiento, además de la búsqueda de nuevas alternativas en sus procesos parece estar dando resultados, al menos en lo que va de este año.

Daniela Tapia
Revista Nueva Minería y Energía
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Fue en octubre de 2014 cuando se inauguró la mina Sierra Gorda, ubicada en la Región de Antofagasta y considerada como uno de los mayores proyectos de cobre en el mundo.

Perteneciente en un 55% a la compañía minera polaca KGHM Polska Miedz y en un 45% a Sumitomo Group Companies, la iniciativa de cobre y molibdeno representaba una señal de esperanza frente a la baja que en ese entonces ya estaba experimentando la minería. Sin embargo, el proyecto no pudo hacer mucho frente a la tormenta que envolvió al sector en los meses siguientes.

El propio gerente general de la operación minera, Robert Wunder, señala que las empresas dueñas de Sierra Gorda SCM analizaron todas las variables antes de realizar la inversión, reconociendo que el proyecto fue diseñado durante el llamado “boom minero” y su construcción se hizo hacia fines de dicho ciclo.

“A esto se suma que la operación minera tuvo algunos retrasos debido a situaciones ajenas. De hecho, la planta fue construida con capacidad para 110 KTPD, que es la que hoy estamos operando”, dice el ejecutivo.

Las cifras también reflejan el mal momento por el que atraviesa la operación. Durante el año 2016 el resultado del ejercicio de la compañía arrojó pérdidas de US$ 2.642 millones, aunque la mayor parte de ese resultado negativo se debe –según la empresa- al ajuste contable que fue necesario realizar al valor de los activos, en cumplimiento de exigencias contables internacionales.

Para revertir este escenario, en Sierra Gorda SCM han estado revisando los costos y buscando alternativas de mayor eficiencia en sus procesos. Según la empresa, estas iniciativas ya se han visto reflejadas en los resultados operacionales del primer trimestre de este año, por lo que actualmente la operación presenta un costo de producción que está en línea con los resultados esperados para este año.

“Hemos invertido un tiempo considerable en estabilizar y optimizar aspectos operativos de nuestra faena, que contempla el uso eficiente de nuestros activos, por ejemplo, en área mina, planta de procesamiento, diseño e implementación de las mantenciones programadas, entre otras áreas”, comenta el gerente general de la operación minera.

Robert Wunder, gerente General de Sierra Gorda SCM. (Foto: Sierra Gorda SCM)

Revisión del modelo y optimizaciones

Dentro de la revisión del modelo de desarrollo del yacimiento, Sierra Gorda SCM recientemente ingresó al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) actualizado, que aborda cambios y ajustes en su operación actual, el que incluye las expansiones contempladas anteriormente y que la compañía podría eventualmente desarrollar en el futuro.

Aunque en Sierra Gorda SCM advierten que no tienen contemplado desarrollar la expansión de las operaciones, aclaran que es habitual incluir la factibilidad de una eventual expansión en el futuro cada vez que se ingresa un nuevo EIA, incluso aunque no esté contemplada una expansión de las operaciones.

Ahora bien, entre los esfuerzos más inmediatos para que la operación mejore sus resultados destaca la necesidad de optimizar la capacidad de diseño de la concentradora, lo cual ya se logró en gran parte del primer trimestre de este año. Otro foco fue el de mejorar las recuperaciones y capacidades de diseño de la planta de molibdeno, medida que se está llevando a cabo actualmente.

En palabras del gerente general de Sierra Gorda SCM, Robert Wunder, la compañía está enfocada en cumplir con los compromisos realizados a los dueños, a través del presupuesto aprobado.

“Creo que las medidas que estamos tomando están mostrando mejoras evidentes, considerando que Sierra Gorda SCM es una operación de baja ley, lo que representa un desafío en términos de procesos y costos”, indica el ejecutivo.

La sustentabilidad, por su parte, también es otra área en la que la compañía ha puesto sus fichas a través de la utilización de agua de mar reciclada en sus operaciones en Mejillones, además de apostar por la eficiencia energética en sus instalaciones de molienda y chancado.

“Sierra Gorda SCM fue una de las empresas impulsoras del llamado APL o Acuerdo de Producción Limpia, que busca controlar y prevenir las emisiones de material particulado en el proceso de transporte de concentrado desde y hacia el Puerto de Antofagasta”, concluye el gerente general de la firma.

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