Riesgo de deuda de Sumitomo se dispara por caída de commodities
S&P puso nota en perspectiva negativa por deterioro en ganancias y firma suspendió entrega de proyecciones.
El desplome del precio de los commodities está pasando factura a la firma de capitales japonesa Sumitomo Mitsui.
El riesgo en los bonos del trader de materias primas ha escalado a un máximo de cuatro años a medida que el colapso en la cotización del níquel la semana pasada a su nivel más bajo desde 2003, pone presión sobre la nota de crédito de la firma.
El costo de asegurar su deuda frente a un impago subió 43 puntos básicos este mes, a 132,5 puntos, el nivel más alto desde enero de 2012, según los datos de CMA.
Sumitomo suspendió la entrega de sus pronósticos de resultado la semana pasada debido a un cargo por 77.000 millones de yenes (US$ 657 millones) en su proyecto de níquel Ambatovy en Madagascar. El director de finanzas, Hiroyuki Inohara, afirmó que las inversiones en petróleo, carbón, mineral de hierro y cobre podrían ser vulnerables a amortizaciones a medida que China se desacelera más rápido de lo previsto.
“Los canjes de incumplimiento crediticio están sintiendo realmente los efectos no sólo de las ganancias, sino del impacto de los precios de las materias primas y energía”, dijo Yasuhiro Matsumoto, experto financiero de Consulting. “Sumitomo debería ser capaz todavía de generar beneficio incluso si las pérdidas por amortizaciones aumentan, pero una mayor caída del precio de los commodities es un factor desestabilizador”.
Perspectiva negativa
Standard & Poor’s recortó la perspectiva de su nota (A-) a negativa desde estable, ya que la prolongada caída en el precio de los recursos ha empeorado las ganancias y los ratios de capital. Moody’s, por su parte, tiene perspectiva estable para la nota A3 de la japonesa.
En el último ejercicio fiscal, Sumitomo registró pérdidas por 73.200 millones de yenes, su peor resultado desde 1997, por depreciación de activos, incluidos los proyectos petrolíferos en EEUU y los de mineral de hierro en Brasil. La firma, que es una de las cinco mayores del país, espera que sus utilidades lleguen a 230 mil millones de yenes en el ejercicio que acaba en marzo, pero en la entrega de resultados del tercer trimestre (5 de febrero) dará nuevas proyecciones. Los analistas estiman que las amortizaciones ascenderían a entre 120 mil millones y 200 mil millones de yenes, incluyendo el cargo de Ambatovy, en este ejercicio.
La japonesa afirma que, aunque el precio de los recursos se mantenga débil por el momento, los negocios no vinculados a las materias primas son sólidos y buscarán recuperar la confianza del mercado y de las calificadoras fortaleciendo su rentabilidad y situación financiera.
Fuente: Diario Financiero
