Revista Nueva Minería

A cinco meses del plazo fatal para implementar el SGE (Sistema de Gestión de Energía), la cantidad de grandes consumidores se ha duplicado y a la fecha no hay empresas autorizadas por la ley para auditar estos sistemas.

Por Marina Parisi
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Los Consumidores con Capacidad de Gestión de Energía (CCGE), también llamados grandes consumidores, “utilizan un tercio de toda la energía que requiere Chile”, asegura Juan Pablo Payero, jefe del área de industria y mercados para la eficiencia energética y cambio climático de AgenciaSE.

Lo anterior significa que este segmento es responsable del 78% de las emisiones de CO2 del país, alejándonos de la meta de lograr la carbono neutralidad al 2050. En ese contexto, minería es la segunda mayor consumidora de energía en Chile, después de transportes, mientras que el rubro industrias, papel y celulosa ostenta el tercer puesto, según el último informe del BNE (Balance Nacional de Energía elaborado por la cartera del ramo).

Por este motivo, la nueva ley sobre eficiencia energética (N° 21.305) publicada en 2021, obliga a racionalizar el consumo y las empresas identificadas como grandes consumidores -cuyo consumo es igual o superior a las 50.000 tera-calorías al año-, deberán adoptar uno o más SGE (Sistemas de Gestión de Energía).

La implementación de estos SGE deberá llevarse a cabo en un período de 12 meses, a partir de la publicación de la nómina con los grandes consumidores, a través del Diario Oficial. El cumplimiento de los SGE, en tanto, será fiscalizado por la SEC (Superintendencia de Electricidad y Combustibles).

Adicionalmente, los grandes consumidores deben informar quién será el profesional designado como gestor energético, a cargo de la adopción del SGE y la reportabilidad de los resultados a la autoridad.

En marzo pasado arrancó la posta: el Ministerio de Energía dio a conocer oficialmente el listado de grandes consumidores, quienes tienen plazo hasta marzo del 2024 para cumplir con sus respectivos SGE.

Proceso de discrepancias

El problema es que la nómina publicada en marzo identificó a “150 grandes consumidores y a agosto pasado la cifra había aumentado a 296”, revela Marta Cabeza Vargas, Superintendenta de la SEC.

Dicho incremento “se debe a que algunas empresas están en proceso de discrepancias, a fin de resolver si son catalogadas como grandes consumidores o no”, aclara la vocera.

De hecho, la normativa contempla que los grandes consumidores tienen 20 días hábiles, desde la publicación en el Diario Oficial, para presentar sus discrepancias en torno a la aplicación del artículo N°9 del Reglamento de Grandes Consumidores. Posteriormente, la SEC tendrá 60 días hábiles para resolver dichas discrepancias.

Si se han sumado nuevos grandes consumidores y aún se están zanjando estas discrepancias, quiere decir que el proceso está siendo más complejo de lo previsto por la autoridad. A ello se suma el hecho de que hasta ahora no hay empresas autorizadas por la normativa, para auditar los SGE.

“En mayo pasado se publicó la Resolución Exenta 17.390, que establece los requisitos que deben cumplir las compañías auditoras para ser autorizadas, pero a la fecha aún no existen firmas de este tipo”, reconoce Cabeza. “Se está trabajando en conjunto con el Ministerio de Energía para promover este tipo de solicitudes”.

SGE no certificados

La timonel de la SEC explica que los grandes consumidores pueden elegir entre implementar SGE certificados en la norma ISO 50.001 o no. “A la fecha el 60% de las empresas ha declarado que incorporarán SGE certificados, el 25% operará con SGE no certificados y el 15% aún está por definir por qué sistema optarán”.

Aquellas compañías que implementen SGE no certificados y consuman más de 100 tera-calorías al año, detalla Cabeza, deberán entregar su informe de la primera auditoría de comprobación dentro de los 40 días siguientes a la adopción del SGE. “Ello significa que tendrán plazo hasta mayo del 2024. Debido a todo ello la fiscalización recién empezará el próximo año”.

Quienes no cumplan con la normativa, arriesgan sanciones monetarias, adelanta Cabeza. “Cualquier incumplimiento a los requerimientos indicados en el reglamento o la Ley, tanto las compañías llamadas a informar sus consumos energéticos como las que tienen que incorporar un SGE o cumplir con auditorías, podrán ser sancionadas y esto compete a la SEC, en conformidad con la ley 18.410. Las sanciones son diversas y pueden llegar a multas de hasta 500 UTM”.

Abrazando ahorros

“Implementar un SGE representa todo un desafío para las compañías que no están familiarizadas con la eficiencia y la gestión energética”, enfatiza Payero. Pero la industria minera ya está familiarizada con este tipo de proyectos, razón por la cual varias faenas ya están trabajando en la adopción de sistemas de gestión de energía.

“Ya sumamos los requisitos estructurales y medulares al SGE y hoy nos encontramos en etapa final de implementación y capacitación”, enfatiza Sergio Fuente-Alba Franco, jefe de Proyectos Digitales y Productividad de Minera San Gerónimo. Los próximos pasos, detalla, son verificar el SGE, primero mediante una auditoría interna y luego a través de una auditoría externa, “para obtener la certificación ISO 50.001:2018”.

“Nuestro SGE incluye un plan de recopilación de datos que se apoya en la incorporación de dispositivos para monitorear el consumo energético (electricidad y diésel principalmente), además de otras variables relevantes para el proceso, como toneladas de mineral procesado en molienda y distancias recorridas por los camiones, entre otros factores”, explica el ejecutivo.

Sin duda, uno de los aspectos que más motiva a la empresa minera tras la puesta en marcha del SGE, es abrazar el anhelado ahorro energético, asevera Fuente-Alba. “En los próximos años esperamos obtener ahorros de hasta un 5%, para lo cual hemos estado levantando oportunidades de mejora en nuestro desempeño energético, además de incorporar el SGE”.

Con todo, dicho ahorro puede escalar hasta el 25%, a juicio de los expertos de la industria, en la medida que exista un real compromiso con la gestión sistemática de la eficiencia energética, revisando detalladamente los diversos factores que impactan en el rendimiento energético, para así aplicar una mejora continua a todo el proceso.

Aunque las compañías no solo deberían tener como objetivo lograr ahorros, advierte Payero. “También hay que otorgar a los SGE la importancia que tienen, alineando la gestión de la energía con los objetivos estratégicos de la compañía y garantizando los recursos necesarios para que la mejora del desempeño energético se produzca; recordando siempre que los SGE deben trabajar para la organización y no al revés”.

SGE para varias plantas

Del listado de grandes consumidores publicado en marzo pasado, el 21% de las firmas corresponde al sector minero, precisa Cabeza. El Grupo Minero Las Cenizas forma parte de este segmento y ya tiene un buen trecho recorrido con su SGE.

“Actualmente, operamos cuatro plantas y hemos desarrollado un piloto junto con Imelsa-Roda para nuestra planta de óxido, ubicada en el distrito minero de Taltal. Este proyecto se encuentra en una etapa bastante avanzada y está a punto de entrar 100% en régimen”, describe Gustavo Cortés, gestor Energético del Grupo Minero Las Cenizas.

“Para nuestros otros tres complejos hemos generado un plan de trabajo que nos permitirá la adopción del SGE en el plazo estipulado”, afirma el experto. Si bien la compañía minera aún no define los ahorros que apunta a alcanzar, ya ha identificado los equipos que más consumen energía y los kpi´s energéticos de cada proceso, lo que le permitirá crear un programa de trabajo con metas de ahorro energético.

“Para trazar objetivos de ahorro, además tenemos que configurar las líneas base de producción de cobre v/s consumo de energía eléctrica y petróleo. Solo así tendremos una visión clara del comportamiento de cada una de nuestras plantas”, describe Cortes. Mientras tanto, los cuatro complejos son monitoreados en línea por un software, “herramienta que dispone de medidores clave para controlar los equipos, identificados como los principales consumidores de energía”.

Experiencia en gestión energética

A sólo cinco meses para que se cumpla el deadline establecido por la ley, ya hay más movimiento en el mercado, “tanto en la demanda como en la oferta de servicios asociados a SGE”, puntualiza Payero.

En ese sentido, AgenciaSE se encuentra apoyando todo este proceso, “mediante la publicación de las guías de: implementación de SGE basados en ISO 50001:2018; casos de éxito de implementación de SGE; metodologías para la realización de auditorías energéticas (“Energuías”); y muchos otros documentos de interés para el sector industrial, que pueden encontrarse en www.AgenciaSE.org/biblioteca”, describe el experto.

De hecho, desde el 2018 que la entidad viene trabajando intensivamente en la incorporación de estos sistemas, enfatiza Payero, “y a la fecha contamos con 80 empresas del rubro industrial, comercial y transportes que han avanzado junto a nosotros en el camino de la gestión energética, logrando ahorros de hasta el 5%”.

Lo anterior ha dado vida a un portal, donde hoy oferta y demanda de servicios energéticos concurren en un solo lugar (www.registroenergetico.cl), apunta el experto. “También es importante destacar que por años hemos mantenido una línea de cofinanciamiento para implementar y certificar un SGE, la que actualmente se encuentra disponible como ventanilla abierta en www.AgenciaSE.org, entregando un financiamiento no reembolsable de hasta $11,5 millones de pesos”.

“Muy pronto lanzaremos varias iniciativas asociadas al registro auditores para la ley 21.305 y la generación de más oferta de servicios de adopción de SGE, aumentando así la demanda de empresas implementadoras de estos sistemas”, concluye Juan Pablo Payero.