Revista Nueva Minería

Computará recursos promedio de los últimos cinco años, y no de 10 años hacia atrás, como planteó el CFA. Expertos advierten que ajuste sería parcial y habría un mayor financiamiento con recaudación transitoria.

Una de las recomendaciones más recurrentes del Consejo Fiscal Autónomo (CFA) en los últimos meses al Gobierno ha sido implementar una metodología de ahorro de los mayores recursos del fisco provenientes de la explotación del litio.

El Ministerio de Hacienda y su Dirección de Presupuestos (Dipres) oficializaron ayer esa recomendación, por medio de un decreto. No obstante, no recogieron la propuesta del CFA. El Gobierno optó por solo calcular como estructurales un segmento de los ingresos por el litio, referidos al arrendamiento de las pertenencias de Corfo a SQM y Albemarle, las únicas dos productoras del mineral.

El decreto aprueba la metodología, procedimiento y publicación del cálculo del balance estructural e incluye la fórmula de cálculo del ajuste prudencial de los ingresos por litio. El otro mineral cuyos ingresos son relevantes es el cobre. En ese caso, el cálculo de ingresos estructurales se hace mediante un comité consultivo establecido como parte de la regla fiscal.

Metodología

En el decreto de ayer se define el umbral del litio que será calculado por la Dipres cuando elabore el proyecto de Ley de Presupuestos. Se construirá a partir de las “Rentas de la Propiedad” de Corfo por litio (sin incluir los aportes a investigación y desarrollo, a comunidades y al Gobierno Regional), como porcentaje del PIB. Se utilizará para ello el promedio de los cinco años previos a contar de julio del año en curso, que corresponde al año previo para el cual se realiza el proyecto de Ley de Presupuestos.

Sobre ese punto, el CFA había advertido que las rentas de arrendamientos representan el 66,5% de los ingresos estatales por litio, pero no incluye la recaudación tributaria de las empresas que explotan el mineral. El CFA proponía que la Dipres podría solicitar al Servicio de Impuestos Internos que evalúe alternativas para entregar la información de los ingresos tributarios de SQM y Albemarle, entre otras ideas. En entrevista reciente, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, argumentó que razones de secreto tributario impiden revelar la contribución impositiva de ambas empresas.

El presidente del CFA, Jorge Rodríguez, planteó que con esta fórmula hay una diferencia técnica con el Gobierno (ver entrevista arriba). El artículo tercero transitorio del decreto establece que sus disposiciones rigen desde el 1 de septiembre de 2023. Se aplicarán para las estimaciones correspondientes al ejercicio presupuestario 2024 en adelante. Se exceptúa para este año el artículo 14 del decreto que regula el ajuste por litio.

Visión de expertos

La economista sénior de LyD, Macarena García, coincide en que “no consideraron las recomendaciones del CFA respecto a ajustar la totalidad de los ingresos del litio (no solo los provenientes de los contratos de arrendamiento de la Corfo, que son 2/3 del total), sino que también los provenientes de impuestos, así como a extender el plazo de los años a considerar para el umbral”.

García agrega que, “dada la gran incertidumbre que hay, tanto por la oferta mundial como por la demanda, especialmente proveniente de China, hubiera sido deseable ser más conservador y ajustar todo. Preocupa que se financien gastos permanentes con estos ingresos que tienen alta probabilidad de ser transitorios”.

En la misma línea, el economista Juan Ortiz, del Ocec de la UDP, dice que la fórmula del Ejecutivo “refleja un ajuste parcial del efecto del litio en las finanzas públicas, dado que solo se están considerando ingresos por litio provenientes de las rentas de propiedad”.

Ortiz complementa que “este hecho implica que en la práctica se estaría subestimando el ajuste cíclico que se realiza a ingresos transitorios provenientes por litio, lo que lleva a mayor financiamiento de gastos con ingresos que parcialmente no son estructurales, sino transitorios”.

Fuente: El Mercurio