Revista Nueva Minería

¨El salto que ha dado nuestro país para transformar su matriz energética es enorme¨, sostuvo el mandatario en el encuentro, donde fue recibido por la directora ejecutiva, Ana Lía Rojas y el presidente de Acera, Jaime Toledo.

La ceremonia se llevó a cabo en CentroParque, cerca de las 10:30 hrs de este martes y contó con la participación de los ministros de Energía, Diego Pardow Lorenzo y de Medio Ambiente, Maisa Rojas.

Además de diversos representantes del sector eléctrico de Chile -tanto público como privado- en conjunto con expertos y líderes nacionales e internacionales, que compartieron sus visiones y experiencias sobre el futuro de la energía y el compromiso con un mundo sustentable. La actividad también incluyó un Congreso y una Feria Tecnológica y Académica.

A continuación, las palabras del Presidente de la República, Gabriel Boric Font:

Es un honor estar acá hoy.

Vengo llegando del ex Congreso Nacional, tenemos una agenda intensa, pero es bueno darse el tiempo para las buenas noticias, para los proyectos de innovación, para los proyectos ya no solo de futuro, sino de presente con mucha proyección.

Es por eso que el reunirnos acá con ustedes para dialogar en torno a los desafíos que tenemos por delante en materia de energías renovables y todos los desafíos que tiene Chile en esta materia y lo que hemos avanzado, y reconocer lo que hemos avanzado en las últimas décadas, es algo que, a mí, por lo menos, me motiva mucho.

Muchas veces estamos acostumbrados a mirar el vaso medio vacío o a pensar la historia solamente desde el punto en el que estamos hoy, pero una de las cosas que me parece muy interesante de la intervención que hacían recién Jaime y Analía es ver cómo nos hemos movido y cómo hemos ido quebrando prejuicios y avanzando en cuestiones que en un momento parecían muy difíciles o imposibles.

Como ustedes mismos nos decían respecto, por ejemplo, de Acera, al comienzo el desafío fue romper las barreras de entrada y los prejuicios que existían sobre las energías renovables. Hoy, con el desarrollo de la industria en particular en Chile, resulta, quizás, un poco más fácil que hace 20 años poder defenderse y defender esta industria frente a quienes tratan de instalar otras cosas como lo que decía Analía respecto de los costos.

Pasa lo mismo en Chile, en general. En esto quiero invitarlos a todos ustedes a ser optimistas. Y me parece importante que también en materia económica, que incide mucho en el desarrollo de estas industrias, veamos dónde estamos respecto de donde nos dijeron que íbamos a estar.

Hace un poco más de un año teníamos una inflación de más del 12%, hoy estamos en el orden del 5% y vamos a seguir bajando; había proyecciones de una situación de crisis en donde íbamos a tener, supuestamente, un crecimiento negativo y esas proyecciones se han ido diluyendo —desgraciadamente, quienes las auguraban hoy no se pronuncian respecto a sus propios augurios—, pero es importante decirle a Chile y al mundo, y en particular a los inversionistas, que en Chile vamos bien y podemos ir mejor si es que nos unimos detrás de causas comunes.

Y yo creo que un espacio como este, en donde se ha demostrado que cuando generamos políticas de Estado, más allá de las diferencias que son legítimas de la política contingente, podemos hacer grandes cosas y en materia energética lo hemos hecho.

El salto que ha dado nuestro país para transformar su matriz energética es enorme. Y, por eso, felicito a Acera en estos 20 años de vida y le agradezco la visión y empuje que ha tenido cuando era difícil tenerlo, cuando significaba quebrar huevos porque ha sido tan importante en el desarrollo de esta industria y, además, de la colaboración permanente que ha tenido con el Estado de Chile para alcanzar las metas que nos hemos propuesto como país.

Yo no sé si se dieron cuenta, espero que sí, pero en medio de la alegría y la pasión que despertaron los Juegos Panamericanos había un pequeño detalle a la hora de las premiaciones que es que las medallas de los ganadores llevaban grabados distintos símbolos de nuestro país y entre ellos un aerogenerador. Las medallas tenían un aerogenerador que representa parte de lo que es hoy la esencia de Chile y de parte de las cosas de las que estamos orgullosos. Y es bonito que así sea porque América y el mundo reconocen a nuestro país como uno que está a la vanguardia en la generación de energías renovables y que está comprometido con prevenir y mitigar los efectos de la crisis climática que, como seres humanos, hemos producido.

Lo hemos dicho en muchas ocasiones, Chile aporta relativamente poco, 0,3% en las emisiones de carbono a nivel mundial. Sin embargo, estamos plenamente conscientes, y como Gobierno lo defendemos de esta manera, que, independiente de cuál es la colaboración de cada uno a la contaminación, todos tenemos que colaborar con igual decisión a la solución.

Chile en esto es vanguardista a nivel mundial y esta es la imagen que estamos proyectando desde nuestro país, y creo que es un buen motivo para sentirnos orgullosos de que así sea porque las energías renovables son presentes, son futuros, son progreso y son también mejor calidad de vida para todos y todas. Y esto se los digo acá, pero que se los diga yo es una transmisión de lo que me dicen a mí de la imagen que existe respecto de Chile en el extranjero.

En las últimas dos o tres semanas tuve la oportunidad de reunirme, primero, con el Presidente Xi Jinping de China y, hace un par de días, con el Presidente Joe Biden de Estados Unidos. En un par de más días más voy a estar participando en la Cumbre de la APEC con parte de las 21 economías más dinámicas del mundo y ahí de lo que más se conversa es del tremendo ya no solo potencial futuro, como promesa, sino potencial real, actual de Chile como pieza en clave en la transición energética para enfrentar la crisis climática, tanto a propósito de nuestras reservas de litio y nuestra Estrategia Nacional del Litio, como también a propósito del desarrollo de la industria del hidrógeno verde, como también del desarrollo de las industrias de energías renovables no convencionales, también por la protección que tenemos de nuestros océanos en un ámbito, quizás, distinto al de este encuentro, pero que también es importante y reconocido a nivel mundial o por lo prístino de nuestros cielos en donde les cuento que acabamos de firmar un decreto para proteger los cielos oscuros porque todo el mundo a través de Chile está viendo el universo entero. Entonces, de verdad tenemos muchas cosas por las cuales estar orgullosos.

Pero esto no es casualidad, no es casualidad de que Chile se haya posicionado como el país más atractivo de América Latina y uno de los 15 más atractivos del mundo para invertir en energías renovables porque estas ventajas comparativas que se han producido han sido gracias al esfuerzo de personas concretas como los que constituyen Acera.

Y esta posición de liderazgo en materia de energías renovables Chile ha obtenido gracias a un compromiso de Estado y a un trabajo conjunto entre el Estado y el sector privado, gracias a leyes y políticas públicas que nos llevan a un futuro renovable y eso nos reconocen los inversionistas extranjeros que ven en nuestras reglas y en nuestras metas de carbono neutralidad un potencial de crecimiento enorme.

Chile, decían nuestros anfitriones, fue el primer país de América Latina y, si no me equivoco, el segundo del mundo después de Fiyi en comprometerse mediante una ley a ser carbono neutral al 2050 y esperamos llegar antes. Sabemos que tenemos desafíos para poder cumplirlo, pero estamos avanzando en esa dirección y no solamente pensando en Chile, sino en el mundo.

Permítanme contagiarles el optimismo. Yo leo todos los días en la mañana la Prensa Austral, que es uno de los diarios de Magallanes, y hace poco uno de los titulares de la Prensa Austral era “Sale el primer cargamento desde el muelle Prat de combustible verde construido con hidrógeno verde y fuel desde Punta Arenas hacia Inglaterra, llevado adelante por la empresa HIF” de, además, capitales chilenos. O sea, esto no es una promesa, lo conversaba con el presidente de una nación extranjera hace poquito en la Cumbre de la APEP y me decía: “No, nosotros estamos estudiando si es que podemos hacer algo con materia de hidrógeno verde”, nosotros ya no estamos en la fase de solamente estudio, estamos produciendo, estamos avanzando ya.

Y ahí tenemos un montón de desafíos para poder hacerlo más rápido, para poder hacerlo mejor, para poder fortalecer la industria, pero estamos en el camino.

Ahora, lo hemos logrado porque hemos puesto a Chile por delante. Por eso, es muy importante que sigamos colaborando Estado y privados unidos, tal como lo hemos hecho hasta ahora, solo así vamos a poder sacar adelante los desafíos que se presentan en materia de transición energética.

Y ¿qué es lo que estamos haciendo como Gobierno? ¿cuáles son parte de nuestras prioridades ahora en esta materia? Implementar la agenda del segundo tiempo de la transición energética para que las fuentes renovables pasen de ser un complemento del sistema eléctrico a la principal fuente de generación. Y en esta ruta hemos puesto el foco en abordar los dos principales desafíos que, entendemos, tiene la industria. Uno, aumentar la capacidad de almacenamiento y, dos, aumentar la capacidad de transmisión.

Y en especial queremos asegurarnos, tal como decía Jaime, que los costos de este cambio no lo paguen los consumidores, particularmente los consumidores más vulnerables, queremos que este cambio energético sea un alivio para los bolsillos de las familias, que la transición hacia una economía más verde, con las energías renovables, el litio, el hidrógeno verde, signifique también mejores oportunidades y mayor desarrollo para comunidades que han sido tradicionalmente postergadas como Mejillones, Diego de Almagro, Coronel —hoy en las noticias por la terrible tragedia del día de ayer en donde fallecieron 14 personas, varios de ellos niños, en un incendio— también Punta Arenas.

Y para esto, este mes, noviembre, va a ser un mes importante porque vamos a presentar, y de eso está a cargo el ministro Diego Pardow aquí presente, nuevas indicaciones al Proyecto de Ley de Transición Energética que estamos trabajando en conjunto con los gremios del sector y con parlamentarios para asegurarnos que siga avanzando con el acuerdo de todas las partes involucradas y que esto se constituya como una política de Estado y no de trinchera. Y, además, vamos a ingresar una ley corta para poder estabilizar las tarifas eléctricas, a propósito de las preocupaciones que manifestaban, justamente, desde Acera.

Con estas iniciativas lo que buscamos es proteger a los consumidores ante las alzas en sus cuentas, apoyarlos en el pago y solucionar también las actuales ineficiencias del sistema con nueva infraestructura, con mejor regulación y pudiendo asegurar, así, la continuidad de las empresas que lo están haciendo bien.

Como ya hemos anunciado, además, antes de fin de año vamos a enviar al Congreso proyectos de ley para reformar los permisos sectoriales y los ambientales. Yo sé que en esta materia hay escepticismo porque es una cuestión muy difícil. Parte de los cuellos de botella que tiene Chile para poder retomar un camino de crecimiento sostenido, no lo único, por cierto, pero es importante, es lograr tener una mayor racionalidad y disminuir los tiempos que se requieren en Chile para poder obtener los permisos necesarios, sin por ello debilitar la institucionalidad ambiental. Ese es el equilibrio que estamos buscando, que estamos trabajando y yo lo he dicho en reiteradas ocasiones mi criterio de éxito para esto es que, sin disminuir, sin debilitar la institucionalidad ambiental, logremos, efectivamente, reducir los tiempos de los permisos que en Chile se han terminado constituyendo como una suerte de impuesto tácito más.

Y, ahí, tanto en materia de reformas a los permisos sectoriales como a las concesiones marítimas, como en el SEIA, Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental, podemos hacerlo mejor y esto yo lo he tomado como una preocupación no solo sectorial, sino que personal y estoy directamente involucrado para poder sacar esto adelante porque sé lo difícil que es y el escepticismo que existe al respecto.

Además, como he dicho aquí, todas estas historias o todo lo que estamos haciendo en materia de energía a veces parecen grandes números, parece que fuera como una discusión de política pública abstracta, pero me interesa dar cuenta de que esto tiene nombres concretos y hay personas que están detrás de esto.

Permítanme ponerles el ejemplo de Songel Aracena, a quien tuve la oportunidad de conocer en Cerro Dominador, ella es parte de la fabricación de heliostatos para el proyecto Cerro Dominador. En una industria que ha sido tradicionalmente masculinizada, ella está orgullosa haciendo esa pega ahí en conjunto, por ejemplo, con Génesis Loyola que es técnico de operación de Acciona.

Estas historias las pueden ver en una bonita iniciativa que tiene el Ministerio de Energía que se llama “Historias con energía”. Busquen “Historias con energía”, Ministerio de Energía y van a poder ver ejemplos que, además, sintetizan muy bien la colaboración entre el sector público y el sector privado.

Otra historia que hay ahí, con nombre y apellido, es la de unos chicos de tercero y cuarto medio de un Liceo de Maipú, Emily, Azael, Ronald, Javier, Víctor, Diego y Maximiliano, que son los primeros estudiantes en participar de un torneo de autos a gran escala de hidrógeno verde, autos chiquititos a control remoto, pero con hidrógeno verde y para eso tuvieron que aprender toda la química detrás. Y esa historia la construimos en conjunto desde el Gobierno y también con la Sofofa que tiene liceos, TP, en donde se están impulsando estas iniciativas.

Una de las cosas que Analía cuando veníamos entrando es que acá uno de los centros que han puesto es en la educación técnico profesional, en particular el diálogo y vínculo con los CFT, es tremendamente importante esa pega que están haciendo.

Ese vínculo entre sector privado, sector público, educación, innovación y generación de riqueza es profundamente virtuoso para Chile. Por eso, no renuncio al optimismo para poder sacar estas cosas adelante.

Estimados y estimadas, tal como se ha dicho aquí, las acciones que tomemos en estos años van a ser decisivas para la lucha contra la crisis climática en Chile y en el mundo entero, y en esto Chile tiene mucho que aportar. Y tengo la certeza de que las energías renovables van a ser y son una herramienta tremendamente importante para alcanzar una mejor calidad de vida para gente de carne y hueso, y nuevas oportunidades de desarrollo para los chilenos y chilenas.

Cuenten con nuestro Gobierno para aquello y para avanzar juntos en esa dirección.