Australia: Con los ojos puestos en el hidrógeno verde y en el intercambio comercial

24 enero, 2022
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A pesar de las adversidades generadas por la pandemia, la nación oceánica ha podido afianzar sus vínculos comerciales con el resto de los países. En el caso de Chile, las oportunidades de cooperación se prevén ambiciosas gracias a las tecnologías limpias, la economía digital y especialmente el hidrógeno verde.

Por Daniela Tapia
Revista NME
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Una nueva ola de la pandemia del Covid-19 azota a Australia debido al avance de la variante Ómicron, que ya está presente en todos los territorios de la nación oceánica. Situación que ha llevado a las autoridades a recuperar algunas restricciones, como el uso obligatorio de la mascarilla. Hasta ahora, este país registra un total de 2.200 muertes por el virus entre sus 26 millones de habitantes.

Pese a este escenario, en opinión de Dorotea López Giral, directora del Instituto de Estudios Internacionales (IEI) de la Universidad de Chile, Australia ha demostrado una resiliencia importante, muy superior en un principio a muchos países desarrollados apenas se desató la crisis sanitaria.

“Esto demuestra que Australia contaba con mejores bases estructurales para hacer frente al Covid-19. Asimismo, es de las pocas economías que registró un crecimiento cercano al 4% en 2021 y una de las pocas que en 2022 crecerá aún más”, dice la especialista.

Y es que en los últimos años la nación más grande de Oceanía ha forjado una de las economías más sólidas en el mundo, y en la medida que las restricciones y la pandemia estén controladas podría experimentar una recuperación mayor, con un aumento en el empleo y una contracción en las presiones sobre los precios, según indican algunos análisis.

Lazos con el mundo

Esta coyuntura, por cierto, ha impactado en el concierto internacional. Varios son entonces los desafíos que deberá enfrentar Australia, especialmente respecto a los diálogos geopolíticos que se prevén complejos.

López Giral hace hincapié en que el país tendrá que caminar por la “cuerda floja” entre los lazos económicos existentes con China y los crecientes vínculos geoestratégicos con el oeste.

“En este contexto se debate su relación con AUKUS (una alianza estratégica militar entre Estados Unidos, Reino Unido y Australia para la región del Indo-Pacífico, según la cual Estados Unidos y el Reino Unido ayudarán a Australia a adquirir submarinos de propulsión nuclear), sus relaciones con la Unión Europea, y su balance con China, así como su pertenencia al Quad con India, Estados Unidos y Japón”, plantea la analista.

De acuerdo a sus propias proyecciones, habrá un mayor deterioro de las relaciones con China, su socio comercial más grande, lo que aumentaría las probabilidades de consecuencias económicas negativas.

En esta misma línea, la experta espera que el país continúe con su responsabilidad fiscal y realice reformas de carácter impositivo. A su vez, deberá revisar cómo el aumento de los precios de la energía beneficiará a los exportadores de gas australianos, al mismo tiempo que aumentarán los costos de insumos para los productores, y deberá analizar el impacto que la contracción del mercado inmobiliario chino puede tener en la demanda de mineral de hierro.

Hidrógeno verde, piedra angular

A pesar de las adversidades generadas por la pandemia, Australia ha podido afianzar sus vínculos comerciales con el resto de los países, planteándose la posibilidad de abrir nuevas áreas de cooperación.

En el caso con Chile, mantiene relaciones formales desde 1945 y desde 2009 que está en vigor un Tratado de Libre Comercio firmado el 2008, que significó que para el año 2010 el comercio bilateral aumentara en un 65%, y que alcanzara los US$506 millones en 2019.

Para la analista del IEI, la relación entre Chile y Australia destaca por tener una identidad conjunta que se ve reflejada en diversos proyectos en los campos de la minería, energía, tecnología y sustentabilidad, entre otros.

“Si bien no hay claridad de lo que sucederá con el CPTPP o TPP11 o el futuro de Chile en el RCEP (Asociación Económica Integral Regional), ambos países tienen un espacio importante para crecer”, comenta.

Situación diferente se visualiza en materia de inversiones, donde unas 200 empresas australianas tienen presencia en Chile, primordialmente en los rubros de tecnología y servicios de equipos para la minería. Otras firmas también están incursionando en una amplia gama de sectores, como la infraestructura, la agroindustria y la educación, por ejemplo.

Pero la economía digital se alza como el ámbito más prometedor a la hora de diversificar la inversión australiana y potenciar el comercio a través de la creación de nuevas oportunidades, al igual que las tecnologías asociadas a las energías limpias.

En este sentido, el medioambiente y su futuro es uno de los temas que unen tanto a Chile como a Australia por la similitud de sus características geográficas, lo que podría fortalecer sus vínculos comerciales.

El hidrógeno verde surge entonces como una gran oportunidad, donde Chile puede aprovechar la experiencia australiana en lo que se refiere a la incorporación a gran escala de este vector energético a la matriz nacional.

“Para Chile la agregación de valor y la diversificación que ha logrado Australia constituye un ejemplo para el futuro de sus políticas de desarrollo. Con la llegada del nuevo presidente de Chile, Gabriel Boric, el lograr un país inclusivo y sustentable se vuelve una prioridad donde Australia puede ser un apoyo en muchos aspectos”, manifiesta López Giral.

Cabe mencionar que el país oceánico ha sido catalogado como “la Arabia Saudita del hidrógeno verde”, liderando los planes de producción de este nuevo combustible limpio con propuestas para construir 5 megaproyectos en su territorio.

El proyecto más grande -del país y del mundo- es el Asian Renewable Energy Hub, en Pilbara, Australia Occidental, donde se planea construir una serie de plantas con electrolizadores con una capacidad total de 14GW. Los cuatro proyectos restantes (dos en Australia Occidental y dos en Queensland, en el este) aún se encuentran en la fase inicial de planificación, pero de aprobarse sumarían otros 13.1GW.

Estrechando vínculos

¿Qué es lo que viene en materia de intercambio comercial? Las proyecciones se prevén optimistas, especialmente las relaciones en materia académica que son cada vez más estrechas entre ambos países dado el interés idiomático y cultural que existe y se podría fomentar.

“Esto es interesante, al igual que los intercambios entre nuestros investigadores en áreas donde tenemos encuentros, como en la minería o el medio ambiente. No hay que olvidar que Australia ha sido un ejemplo en la exportación de servicios educativos, una esfera que Chile debería abordar por sus claras ventajas”, explica la directora del IEI.

Así las cosas, López Giral argumenta que tanto Australia como Chile hoy enfrentan algunos obstáculos por delante en el camino de regreso a la recuperación económica.

“El desafío que tenemos es estrechar nuestro intercambio. Como países relativamente más pequeños en el escenario mundial y con la evidencia que ha dejado esta pandemia, la cooperación se hace esencial entre dos economías como las nuestras”, afirma.

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