Revista Nueva Minería

(Foto: Codelco)

La Convención del Instituto de Ingenieros de Minas, que este año tuvo a Copiapó como la ciudad anfitriona, destacó por los planteamientos de mineras y empresas relacionadas para “dar cara” al deprimido actual escenario del sector y al leve repunte que podría llegar en el corto y mediano plazo.

Revista Nueva Minería y Energía

Camila Morales
Desde Copiapó
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“Renovación del modelo de negocios minero en tiempo de crisis”. Éste fue el lema escogido por el Instituto de Ingenieros de Minas de Chile (IIMCh) para establecer las temáticas de la versión 67° de su Convención Anual. Y precisamente hacia eso apuntó el debate de este tradicional encuentro que reúne a los profesionales mineros del país.

“No necesariamente se debe ver la crisis como algo negativo, sino como una oportunidad de cambio. Por eso esta Convención queremos dedicarla para enfrentar nuevas realidades”, advertía el chairman del encuentro, Patricio Picero, al inaugurar el evento que este año se realizó en Copiapó.

La elección de esta ciudad no fue casual. Durante los años del superciclo del cobre, la capital de la región de Atacama se transformó en una ciudad pujante, que experimentó un gran crecimiento de la mano de grandes proyectos mineros y energéticos. Sin embargo, la recesión de la industria minera y la postergación o suspensión de millonarias inversiones en la zona golpeó fuerte a la región, y particularmente a Copiapó, ciudad que también se vio afectada por el aluvión que vivió Atacama en marzo del año pasado y que causó serios daños a las operaciones de la pequeña y mediana minería.

En este contexto, el IIMCh quiso entregar una señal de apoyo y confianza a la zona organizando su principal evento en Copiapó. Sin embargo, el balance final arrojó una menor asistencia en comparación a la versión anterior, realizada en Viña del Mar, y se extrañó la presencia de autoridades sectoriales relevantes durante la jornada inaugural. Así, la actividad fue fiel reflejo del deprimido momento que vive la industria.

Incertidumbre y oportunidades

Si bien en la edición del año pasado la Convención se caracterizó por analizar el complejo momento que ya vivía la minería, en un contexto de bajos precios de los metales y de crecientes retos para la industria, este año la actividad asumió el escenario de crisis y dio un giro en las temáticas abordadas.

Así, la sexagésima séptima versión del encuentro, tal como lo señaló días antes el presidente del IIMCh, Juan Pablo González, encuentra a la industria en una etapa compleja y con grandes desafíos. “Es un periodo de incertidumbres pero con oportunidades para empresas y profesionales”, aseguró el representante del Instituto.

De esta manera, la 67° Convención enfocó el debate a la necesaria reformulación de la industria en medio de una realidad compleja y que continuará siendo difícil, al menos durante el próximo año.

“Esta Convención se desarrolló en un escenario de evidente desaceleración económica, donde miles de empleos mineros directos se han perdido, donde empresas colaboradoras han disminuido su actividad, o directamente han visto terminados sus contratos, bajo el manto de un precio internacional del cobre que escasamente logra cubrir sus costos de producción, lo que ha obligado a empresas minera a enfrentar profundas reestructuración y gestionar planes de contingencia de reducción de costos”, detalló Ramón Rada, director del IIMCh, en el marco del evento.

En este sentido, los procesos de cambio al interior de las compañías mineras, el aporte de la innovación al sector y las nuevas formas de relación entre las empresas mineras y contratistas, se tomaron el debate en Copiapó.

Cambio de foco

El evento, que reunió a ejecutivos y profesionales de diversas compañías mineras con operación en Chile, planteó varias interrogantes que asumen el delicado momento de la industria, y que buscan responder a una pregunta central que se plantea todo el sector: ¿cómo mantenerse a flote en el actual contexto adverso?

El IIMCh quiso entregar una señal de apoyo y confianza a la Región de Atacama organizando su principal evento en Copiapó. (Foto: Camila Morales)

Con este panorama, el chairman del encuentro y gerente General de Minería en Minera Candelaria y Ojos del Salado, Patricio Picero, puso énfasis en la necesidad de entender este periodo como un punto de inflexión para avanzar hacia una nueva etapa.

“Este ciclo ya tiene un término. No se puede ‘estrujar’ más la industria. Ahí viene el planteamiento de analizar nuevos modelos de negocios, porque durante el periodo de altos precios las variables de negocios se equilibraron, pero trajo decisiones tardías en optimización y mejoramiento”, reconoció Picero en el marco del evento.

Por su parte Pablo Carvallo, gerente de Optimización de Operaciones en Antofagasta Minerals, recalcó la importancia de mantener el foco en el control de costos y la eficiencia de las operaciones en tiempo de crisis, argumentando que “en tiempos complicados, no hay que olvidar las cosas que sabemos hacer bien”.

En tanto, desde el IIMCh llamaron a priorizar “un diálogo constructivo” para repensar el modelo de negocios minero en “los tiempos de crisis que vivimos”, junto con retomar la eficiencia de los procesos, impulsar la productividad de las faenas mineras, y promover la competitividad de la cadena de valor.

De acuerdo al director del IIMCh, Ramón Rada, este “diálogo constructivo” también debe servir para “permitirnos observar mayores rentabilidades de las operaciones” que, en su opinión, se han condicionado para salvaguardar el flujo de caja que permite mantener el ciclo productivo a flote. “Lo anterior es clave, ya que es bien sabido que los negocios no fracasan por su proyección de negocio, sino por su flujo de caja”, advirtió.

El carácter cíclico de la industria, marcado por alzas y bajas en los precios de los metales, fue recordado por más de algún asistente, a la hora de las preguntas en las sesiones plenarias, buscando explicaciones por la falta de visión que habría tenido la industria en los tiempos de bonanza al no anticipar a tiempo el escenario que hoy vive el sector.

En relación a este mismo tema, el gerente General de la División Salvador de Codelco, Juan Carlos Avendaño, argumentó que en tiempos de bonanza “es normal tomar mayores riesgos, porque hay mayor posibilidad de inversiones”.

Chile, líder en minería

Pero el debate no solamente se centró en el análisis de nuevo modelos de negocios para la minería. La Convención también otorgó espacio para destacar a Chile como un país que ha sabido mantenerse como líder en minería, a pesar de los vaivenes de la industria.

Uno de los exponentes que se refirió a este tema fue Ignacio Moreno, todavía subsecretario de Minería al momento de la Convención. Si bien reconoció que Chile “ha perdido el foco”, fue enfático en señalar que el país “debe volver a marcar liderazgo en la industria”. En este sentido, Moreno recordó que el portafolio de proyectos mineros entre 2016 y 2025 involucra inversiones por US$ 49.208 millones, con 37 iniciativas mineras.

“Si se concreta el 70% del total de estas iniciativas, percibiremos inversiones similares a lo que se invirtió en Chile en la última década”, explicó.

Respecto a las proyecciones del precio del cobre, Ignacio Moreno afirmó que en 2019, e incluso a fines de 2018, los expertos indican que habría una mayor demanda de cobre. “Ya pasamos los meses difíciles, ahora queda prepararnos para lo que viene”, afirmó.

Empresas mineras versus contratistas

Otro tema que marcó el debate de la Convención fue la relación entre las empresas mineras y los contratistas en el actual escenario de “tiempos de crisis”.

“La minería es un negocio intenso en activos y complejo de gestionar, pero donde el factor humano seguirá siendo clave”, señaló Marcelo Uría, superintendente de Contratos Mina de Minera Doña Inés de Collahuasi al inicio al debate.

Por su parte, Rodrigo Herrera, gerente de Administración de la División El Teniente de Codelco, dijo que es importante “dejar de mirarse el ombligo y comenzar a visualizar valor. Por eso debemos tener la disposición genuina de tomar nuevos rumbos con las empresas contratistas”.

¿Cuál fue la reflexión por parte de las empresas de servicios? Pedro Damjanic, vicepresidente Minería de Finning Chile, expuso que en el periodo complicado que atraviesa el sector “se genera un espacio importante para las empresas contratistas de alto conocimiento, porque al agregarle valor a la operación se generan aumentos notables en la productividad de una mina”.

En relación a este valor agregado que pueden otorgar las empresas contratistas, José Miguel Ríos, Business Manager de Orica, afirmó que “es posible generar alianzas estratégicas de largo plazo a partir de propuestas de valor. Ese es el desafío, determinar cómo somos capaces de mejorar la logística de una operación minera”, enfatizó.

El debate sobre la relación de las empresas mineras y contratistas centró la atención del segundo día de actividades. En la foto, los expositores que participaron de este módulo. (Foto: Camila Morales)

Reconocimientos

Si bien la Convención Anual es sinónimo de debate y presentaciones técnicas, el evento también reserva un espacio para la entrega de los tradicionales premios anuales que otorga el Instituto.

En el marco de la ceremonia inaugural, que este año se realizó de manera inusual al término de la primera jornada de exposiciones, el IIMCh reconoció a Minera Antucoya, del Grupo Antofagasta Minerals, con la distinción “José Tomás Urmeneta”, mientras que el premio al “profesional distinguido del 2016″ se entregó a Hugo Olmos Naranjo, académico de la Universidad de Atacama, quien fue distinguido por su aporte a la mediana minería de la región.

Nacido en Ovalle, y con estudios en la ex Universidad Técnica del Estado (UTE), Olmos agradeció emocionado la distinción. “Es un honor recibir este premio, porque existen muchas personas competentes mejores que yo que pudieron haber sido elegidos como el profesional distinguido de este año”, afirmó entre aplausos.

En tanto, el IIMCh reconoció con la “Medalla al Mérito” a Fernando Pino Osorio, con una trayectoria de más de 50 años como ingeniero en procesos metalúrgicos, en plantas y fundiciones de empresas como Enami y Codelco. Sin embargo, Pino no asistió a la Convención, por lo que el Instituto optó por entregar el reconocimiento en otra oportunidad.