Revista Nueva Minería

El presidente de Sonami analizó el impacto de la huelga, además de dar cuenta de las condiciones para el metal para este año.

Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), dio cuenta del impacto que tuvo la paralización de faenas en Escondida. En entrevista con El Mercurio, el ex ejecutivo de Codelco y BHP, explicó que la paralización generó un impacto directo en el crecimiento de la producción del metal.

Si bien se proyectaba para 2017 que la producción llegara a los 5,8 millones de toneladas, Hernández estipuló que lo más probable es que llegue a los niveles de 2016: 5.545 millones de toneladas.

Además habló de cómo se ha reducido la industria desde 2012, cuando alcanzó el peak. En ese momento el cobre representaba 260 mil trabajadores, actualmente la industria representa 193 mil, con una baja de 26%. ¿Las razones? La caída en el precio del metal y la calidad de los yacimientos, entre otros. Por lo que el mercado, indico Hernández, tiene que adaptarse a estas nuevas condiciones.

Analizando las consecuencias que dejó la huelga de 46 días en Escondida, Hernández dijo que muchos consideraban que las negociaciones perjudicaron, principalmente, a los trabajadores, que sólo en concepto de sueldos, bonos y otros ítems de la remuneración perdieron entre $10 millones y $11 millones. Si a esto se le suma el bono que no llegó al desestimar la oferta de la empresa –que habría sido de $11 millones– se llega a perdidas por trabajador entre $20 millones y $22 millones.

2016 fue un año difícil para la industria. Con un valor promedio de la libra de cobre en US$2,2, Hernández cree que este año va a ser superior. Indicó que sólo en el primer semestre hubo un valor de US$2,65 y que al cierre del año debiera oscilar entre US$2,5 y US$2,6.

Fuente: Pulso