Sindicato de Quebrada Blanca amenaza con paralización
Hoy expira el convenio colectivo de la minera perteneciente a la canadiense Teck.
Un complicado escenario le espera a la canadiense Teck, en su proyecto Quebrada Blanca.
Y es que hoy vence el contrato colectivo de los trabajadores del sindicato Quebrada Blanca -que agrupa a unos 105 trabajadores- y todo apunta a que se rechazará la pospuesta de la empresa, obligando a la negociación reglada.
La propuesta de la minera incluye 0% de reajuste real y un bono por término de conflicto por unos $1,8 millones, con una extensión de 28 meses. Esta propuesta se diferencia con lo visto en febrero, cuando Teck Chile llegó a acuerdo con otros dos grupos de trabajadores de la empresa: el Sindicato Administración y el Sindicato N° 2, que suman unos 354 empleados. Según trascendió, dicho acuerdo culminó con la extensión por 15 meses la vigencia de los convenios colectivos, además de un bono por término de conflicto por unos $3 millones.
“Hay un convencimiento absoluto de nuestros asociados de que no podemos aceptar esta oferta. En febrero la empresa nos hizo un ofrecimiento, y el actual ni siguiera se iguala; incluso considerando que hay un mejor escenario del precio del cobre y mejoramos los costos de producción”, comentó Jorge Flores, presidente del sindicato Quebrada Blanca.
Con todo, explicó que “en total son 105 los trabajadores que deben votar en las faenas de Quebrada Blanca y las oficinas de la inspección del trabajo en Arica, Iquique y La Serena. Después, en dos días, estamos proyectando que la empresa solicite la mediación obligatoria (buenos oficios) y de ahí esperar que en cinco días más se logre algún acercamiento, de lo contrario se haría efectiva la huelga”.
No obstante, al interior de la organización hay temor que el conflicto que se avecina genere dudas por parte de los accionistas para aprobar el mega proyecto de expansión de Quebrada Blanca, y que adicionalmente extiende su vida productiva en más de 30 años.
El proyecto tiene un costo de US$5.000 millones y de acuerdo con estudios preliminares, el proyecto permitiría alcanzar una capacidad de producción de aproximadamente 240.000 toneladas de cobre en concentrado y 6.000 toneladas de molibdeno en concentrado por año. Este actualmente está en evaluación ambiental.
Fuente: Pulso
