Revista Nueva Minería

Los plazos estipulados en el concurso, más las interrogantes respecto al comportamiento de la demanda eléctrica, son sólo algunos de los factores que estarían pesando en el interés de las empresas de generación por participar en el proceso.

Varias empresas de generación eléctrica se estarían restando del proceso de licitación llevado adelante por la Comisión Nacional de Energía (CNE) para abastecer a clientes regulados a partir de 2024, y cuya fecha de presentación de ofertas es en menos de un mes.

Y es que según fuentes del sector, en este concurso -donde se ofrece 2.200 GWh para abastecer las necesidades de energía de los clientes regulados de los Sistemas Interconectados Central y del Norte Grande (SIC y SING), a partir del 1 de enero de 2024, por 20 años- hay varios factores que inhibirían la competencia, entre las que se encuentra el tamaño del concurso, los precios que han alcanzado estas licitaciones en el pasado, los plazos estipulados y una menor demanda proyectada.

Si bien se espera que las grandes generadoras sigan concursando, no se prevé una presentación tal como las 84 ofertas presenciadas en la licitación del año pasado.

Y es que un tema que incomoda a las empresas son los plazos que se manejan en esta licitación, ya que la CNE amplió en un año el período entre la adjudicación y la inyección de energía, pasando de enero de 2023 al 2024, es decir, siete años entre que se adjudica y se inyecta. Y dado la rapidez con que está cambiando el mercado, la ampliación de los clientes libres y las variaciones de precios, más de uno lo considera riesgoso.

A esto se suma, que generadores ven con recelo la necesidad de esta licitación, sobre todo por el comportamiento de la demanda, la que al menos en los primeros años se espera que se ubique por debajo de lo estimado por la CNE.

Un tercer factor, comentan, sería que más de un generador estaría enfocado en el mercado de los pequeños medios de generación distribuidos (PMGD), que permite a los proyectos menores de 9MW optar por vender energía sujeta al régimen de “precio estabilizado”, y equivale a valorizar la energía al Precio de Nudo de Corto Plazo (PNCP) en el punto de inyección, el cual dura cuatro años. Dicho precio estaría por estos días en unos US$60/GWh, por encima de los precios de adjudicación.

Todo lo anterior se ha traducido en una reducción de las asesorías que han contratado los interesados. Si en el pasado un estudio de abogados colaboraba con tres ofertas, ahora este se ha reducido a cero; mientras que en otro caso ha pasado de cerca de la decena, a un par.

Consultada la CNE, su secretario ejecutivo Andrés Romero desestima que se reduzca la competencia en el próximo concurso. “Habrá más de diez veces la energía ofertada”, dice, especificando que aún hay mucha energía “dando vuelta” en el mercado.

Otras señales

Otros antecedentes dicen relación con las preguntas realizadas por los interesados al regulador. En una de ellas, es que se le solicita directamente cancelar la Licitación 2017/01 y esperar al Informe de Licitaciones 2018 definitivo para evaluar la realización de un proceso licitatorio durante el próximo año. Esto, explica, ya que los insumos para proyectar la demanda, presentarían incertezas al considerar una mayor tasa de crecimiento del PIB, al no considerar el Censo de este año sino el de 2002 para proyectar el alza de la población y al no incluir los efectos de la generación distribuida .

Dicha petición fue rechazada por la CNE, argumentando que el concurso considera sólo una parte de los requerimientos proyectados para el año 2024 respecto a lo indicado en el Informe Final de Licitaciones, lo cual permite contar con holguras para la próxima licitación ante eventuales cambios en la proyección de demanda.

Otro interesado en tanto, pide que en los contratos de suministro con las distribuidoras se establezca una cantidad mínima de energía a facturar. Esto, ante la incertidumbre de si la demanda le permitirá abastecer la totalidad de su contrato. Esto tampoco fue acogido por la CNE.

Fuente: Pulso