Minera Santo Domingo finaliza este mes estudio de factibilidad de proyecto por US$ 1.800 mills.
El yacimiento está en la Región de Atacama y contempla la producción de cobre y magnetita
En línea con los objetivos fijados para 2013, el consorcio minero conformado por la canadiense Capstone (70%) y la coreana Kores (30%) está próximo a finalizar el estudio de factibilidad de su proyecto Santo Domingo, en la comuna de Diego de Almagro, III Región.
El proyecto, que utilizará en su proceso agua de mar sin desalar, considera la explotación de reservas minerales de cobre y magnetita, proyéctandose una producción de 3,6 millones de toneladas de concentrado de cobre y 75 millones de toneladas de concentrado de magnetita, durante la vida útil del proyecto que se prevé de 18,5 años.
El gerente general de Minera Santo Domingo, Juan Carlos Alfaro, indicó que una vez concluido el estudio de factibilidad, este será presentado a los accionistas a fines de diciembre o principios del próximo año, quienes evaluarán la oportunidad de su concreción.
El ejecutivo indicó que si bien la intención de Capstone y Kores es materializar la iniciativa, su construcción dependerá de la seguridad de contar con suministro eléctrico, lo que aún no está resuelto. “El cronograma y la aprobación de los dueños sigue supeditada a conseguir un acuerdo de abastecimiento eléctrico a costos competitivos y razonables para el proyecto”, señaló Alfaro, quien agregó que “si para el momento en que obtengamos el permiso ambiental tenemos resuelto este tema, la idea sería empezar su ejecución”. El consumo de energía del proyecto está estimado en alrededor de 105 MW, según cálculos de la empresa.
Hace un mes la compañía ingresó el Estudio de Impacto Ambiental ante el servicio de evaluación y hasta ahora su tramitación ha ido avanzando.
En total, la inversión del proyecto se estima entre US$ 1.500 y US$ 1.800 millones, monto superior a la estimación inicial del estudio de prefactibilidad de agosto de 2011 (US$ 1.240 millones), debido a la actualización de los costos y la incorporación de un puerto propio.
En la etapa de construcción se requerirá mano de obra calificada de unas 1.550 personas en promedio y más de 4. 000 como máximo.
Fuente: El Mercurio
