Lento desarrollo: El complejo panorama de la energía hidroeléctrica

25 agosto, 2014
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Angostura, inaugurada recientemente, fue el último proyecto hidroeléctrico en entrar en operaciones en 10 años, después del polémico proyecto Ralco, en 2004. (Foto: Colbún)

Angostura, inaugurada recientemente, fue el último proyecto hidroeléctrico en entrar en operaciones en 10 años, después del polémico proyecto Ralco, en 2004. (Foto: Colbún)

Bajan las cotas de los embalses y suben los costos marginales. A eso debe sumarse un escaso desarrollo hidroeléctrico en los últimos años. Aunque el escenario es complejo para esta energía, el gobierno ya piensa en tomar cartas en el asunto.

Rodrigo López – Revista Nueva Minería y Energía
 

Chile pasa por un período complejo en materia de energía hidroeléctrica. Desde el Centro de Despacho Económico de Carga del Sistema Interconectado Central (CDEC-SIC) informan que las cuotas de los embalses están en niveles muy similares al año pasado (es decir, bajos), y que la situación no ha mejorado y tampoco se espera que mejore. Esto, originado por el escaso aporte de las lluvias en los últimos cinco años, está generando un complejo panorama para la energía hidroeléctrica, pensada hace algunos años como una de las energías con denominación de origen para el desarrollo de nuestro país.

De acuerdo a la información proporcionada por el ente coordinador del despacho del SIC, los embalses Ralco, Chapo, Laja, Colbún, La Invernada y Rapel presentan niveles iguales o inferiores a 2012. La Invernada fue el único embalse que tuvo un buen inicio de año 2014, pero desde abril ha disminuido su cota a niveles críticos, llegando casi a los 1.280 msnm. En 2013, la cota en esta fecha se mantuvo en 1.283 msnm, y en 2014, la cota llegó casi a los 1.295 msnm.

“Hemos visto la sequía en los últimos cinco años, y necesitamos tener solucionados los temas de transmisión, que hoy son una prioridad”, dice el presidente de la Asociación de Generadores de Chile, René Muga, quien agrega que “el escenario en los últimos años es complejo ya que el aporte hidroeléctrico a la generación eléctrica es deficiente”.

El representante gremial explica que, dado la baja cota de los embalses y las sequías de los últimos cinco años, los costos marginales han aumentado, “ya que se ha priorizado la generación con fuentes termoeléctricas, principalmente de centrales que operan con diésel, que arrastran los costos marginales al alza”.

Justamente, los costos marginales del Sistema Interconectado Central han mostrado un alza constante en sus precios, pasando por rangos desde los US$100 por MW/h en 2006, a los US$250 por MW/h durante la crisis del gas argentino que se vivió en 2008. Aunque en los últimos años los rangos de precios han entrado en una fase de estabilización, los costos marginales del SIC están rondando en torno a los US$150 y US$200 por MW/h, lo que se sigue considerando alto. Los precios bajos ya son parte de la historia.

Las proyecciones del CDEC-SIC también son desalentadoras. Los costos marginales proyectados para la barra Alto Jahuel se sitúan entre los US$100-US$220 MW/h en el escenario hidrológico más probable, que es el de hidrología seca.

“El total de energía hidroeléctrica es equivalente a lo que el país producía hace quince o diez años. La energía hidroeléctrica es una energía con potencial, pero poco aprovechada”, aclara Muga. “No hemos sido capaces de aprovechar el potencial. Aunque existe un completo acuerdo entre los actores de que la Agenda (de Energía presentada por el gobierno) exige mayor aprovechamiento, es una tarea que como país tenemos pendiente”, dice el dirigente gremial.

De acuerdo a su diagnóstico, dejar de lado una de ellas puede traer consecuencias. “En el SIC, el avance del desarrollo hidroeléctrico debe ir a un ritmo semejante al desarrollo térmico, ya que ambas se pueden complementar en sus ciclos”, dice.

Altos precios = bajo desarrollo hidro

La central Ralco, inaugurada hace más de una década.

La central Ralco, inaugurada hace más de una década.

Lamentablemente, el escenario de altos precios de la energía ha coincidido con un bajo desarrollo de centrales hidroeléctricas en los últimos años. De acuerdo a René Muga, en este período se ha dejado de lado el desarrollo de este tipo de centrales, y se ha priorizado el desarrollo termoeléctrico, que es visto actualmente como la niña bonita de la matriz energética chilena. “No hay proyectos que reflejen el potencial”, explica.

En estos momentos, Alto Maipo es la única central de gran capacidad de generación que está en carpeta, pero está teniendo un gran desafío por delante, ya que está totalmente en la mira de la opinión pública por las continuas protestas contra este desarrollo eléctrico.

De hecho, al cierre de esta edición, la Coordinadora Ciudadana Ríos del Maipo (CCRM) junto a los representantes de las casi 70 organizaciones adheridas protestaron contra el Proyecto Hidroeléctrico Alto Maipo (PHAM) en una masiva manifestación que se realizó en el centro de Santiago, a inicios de agosto.

“Necesitamos que los habitantes de Santiago despierten, es el agua de todos la que está en riesgo. Antofagasta Minerals (Amsa), del grupo Luksic, y la transnacional AES Gener, ya empezaron a afectar el Cajón del Maipo. No podemos permitir que perjudiquen la zona, ni menos el río Maipo que provee el 80% de agua potable para la capital y será dañado. Es el momento de despertar y para ello necesitamos la unión de todos”, dice la dirigenta Marcela Mella, vocera de CCRM. Los estudiantes secundarios se unieron al llamado realizado por la Coordinadora Ciudadana y la vocera de la ACES, Lorenza Soto, manifestó que el objetivo fue “luchar codo a codo por un derecho fundamental como es el agua”.

Desde 2007 la CCRM está en constante trabajo para detener el proyecto Alto Maipo, desarrollando estudios, protegiendo con recursos legales y saliendo a las calles para realizar marchas con el objetivo de informar a la población sobre los impactos, que de acuerdo a su opinión, causará la iniciativa energética de la empresa AES Gener.

A la convocatoria han respondido y sumado diferentes actores sociales, desde el mundo de la político hasta animadores de televisión, los que participaron en el desarrollo de videos que son publicados a diario a través de las redes sociales tales como Facebook (“No Alto Maipo”) y la cuenta de Twitter @NoAltoMaipo, la cual ya cuenta con cerca de 11.000 seguidores.

Apoyo gubernamental

El proyecto Alto Maipo está en el centro de la polémica, lo que abre interrogantes sobre su futuro.

El proyecto Alto Maipo está en el centro de la polémica, lo que abre interrogantes sobre su futuro.

De todas formas, la Presidenta Bachelet anunció un amplio apoyo a la energía hidroeléctrica en la última Cena de la Energía 2014, donde manifestó que “sabemos que debemos aprovechar responsablemente nuestras enormes riquezas naturales. Por eso vamos a impulsar la hidroelectricidad, pero haciéndonos cargo del nuevo escenario que vive el país”, dijo la jefa de Estado.

En esa línea, la Mandataria anunció que “a partir del segundo semestre de este año, el Ministerio de Energía desarrollará un intenso proceso para identificar las cuencas a priorizar para el desarrollo sustentable del potencial hidroeléctrico de Chile”.

“El objetivo será identificar aquellas cuencas que provean del máximo potencial de generación y a la vez minimicen los impactos ambientales y socioculturales. El resultado será una mayor orientación para la inversión y también mayores garantías para la ciudadanía”, explicó.

Al respecto, Muga señala que el gobierno ya se encuentra en un proceso para licitar los estudios para definir el ordenamiento territorial. “Actualmente el ministerio de Energía está licitando el primer estudio y está en proceso de realizar definiciones más claras y robustas de las reglas de uso del territorio”, dice Muga.

Por el momento, el foco del ministerio de Energía para los próximos años está en varios temas. Y entre ellos, la prioridad está puesta en las ERNC, en la interconexión SIC-SING y en el aseguramiento del suministro eléctrico para los años 2014-2018, principalmente en base a centrales de GNL. El desafío del gobierno será equilibrar y compatiblizar todas las demandas energéticas en los próximos años.

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