Fundación Chile impulsa emprendimientos para la minería

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La entidad cuenta con un portafolio de varias empresas que están desarrollando productos innovadores, y muchas de ellas ya han logrado convertirse en importantes proveedores para la minería.

Una fuerte apuesta por el emprendimiento para la minería está realizando Fundación Chile a través de dos programas. Su objetivo es abrir un espacio para impulsar iniciativas innovadoras y de alto impacto para dar soluciones a las problemáticas de esta importante industria del país. Así, los emprendedores tienen la oportunidad de convertirse en proveedores.

En el portafolio de esta entidad, hay varias empresas que están desarrollando productos innovadores para la minería. Por ejemplo, Micomo, que hace sistemas de monitoreo de deformaciones estructurales en túneles y taludes mineros; M-risk, que produce un software de gestión para cubrir las dimensiones HSEC (Health, Safety, Environment y Community), y Maquintel, que fabrica un robot para inspeccionar grandes ductos de la minería.

Andrés Pesce, gerente de Negocios & Empresas de Fundación Chile, sostiene que la industria minera presenta hoy diversos desafíos que solo pueden ser resueltos a través de la innovación.

“Podemos usar el cobre para desarrollar tecnología que aumente el contenido de conocimiento que exportamos embebido en cada tonelada de cobre, primero, y exportar ese conocimiento a través de productos y servicios, después. Nuestras industrias de recursos naturales, con el cobre como ariete, nos pueden ayudar a transitar hacia una economía más intensiva en conocimiento, aunque parezca una paradoja”.

Asegura que en Chile la minería es un sector con una masa crítica, sofisticación y profundidad tal, que permite sostener el desarrollo de un ecosistema de empresas intensivas en conocimiento que se consoliden al alero de la demanda minera, y que luego se puedan convertir en un sector en sí mismo, vendiendo a otros sectores y a otras geografías.

“Es decir, las tecnologías y soluciones que se desarrollen para resolver los problemas de la minería pueden ser aplicadas también a otros sectores y exportadas a otros clientes mineros en el mundo”.

Chile es más o menos el 0,2% en casi todo respecto al mundo, en población, PIB, gasto en I+D, etc. En contraste, la minería del cobre en el país representa el 30% del mercado mundial (y cerca del 60% de la gran minería del cobre mundial). “Por tanto, tiene sentido movilizar energía emprendedora, capital y atención a este mercado grande, sofisticado y profundo que tenemos, en vez de enfocarse en el enésimo B2C que busca emular los fenómenos de Silicon Valley”.

Y agrega: “Tiene sentido construir un portafolio de opciones que tenga una coherencia estratégica, puesto que esto hace que las posibilidades de éxito de alguna de ellas aumente. No sabemos cuáles van ser exitosas realmente, e incluso cuando tengamos éxito, este será distinto y vendrá de una forma diferente a lo que vislumbrábamos. Al tener un portafolio con una coherencia “editorial” somos capaces de reciclar los intentos fallidos de manera más efectiva”.

Plataforma de Emprendimiento

A través del Programa de Proveedores de la Minería, que busca potenciar a las empresas que ya son proveedoras de este sector, y del Programa del Emprendimiento, cuyo objetivo es movilizar actores (emprendedores, profesionales, inversionistas) que hoy no están en el sector, Fundación Chile está desarrollando empresas intensivas en conocimiento con los desafíos más sofisticados de la minería.

“Al poco andar, la frontera entre estos dos programas se va haciendo más difusa, ya que una vez que un emprendedor empieza a vender se transforma en proveedor y comienza a enfrentar desafíos similares a sus pares establecidos hace más tiempo. Además, tiene sentido para muchos emprendedores asociarse con proveedores más grandes que hacen el rol de OEM (Original Equipment Manufcaturer) o Prime Contractors”, explica Pesce.

Por otro lado, agrega, cuando se publican desafíos, por ejemplo, las convocatorias son válidas tanto para proveedores establecidos como para empresas emergentes.

“Por eso tiene sentido gestionar estos programas de forma integrada, algo que estamos haciendo. Es decir, la Plataforma de Emprendimiento es un “track” de nuestro programa de desarrollo de proveedores de la minería, que se apoya en él pero su vez lo potencia”.

La intención de esta entidad es que sus emprendimientos se transformen en proveedores de clase mundial. Para ello, los apoyan con capital -a través del fondo SSAF de CORFO y, próximamente, con un fondo de capital de riesgo para emprendimientos que atiendan a la minería- en el desarrollo de sus negocios, acceso a mercados y fuentes de financiamiento.

“Es importante entender que este camino de desarrollo no es una trayectoria lineal en la que se pasa de la etapa A a la B. Es decir, no se trata de un camino en que los emprendimientos se “gradúan” y luego pasan a ser proveedores de clase mundial. El proceso es mucho más complejo y caótico”.

Al respecto, aclara que no necesariamente los emprendimientos exitosos que participan de esta plataforma formarán parte del programa de desarrollo de proveedores, pero sí se benefician de la infraestructura que tiene armada para ello.

“Lo que buscamos es proveer las condiciones para que aumenten las probabilidades de que los emprendimientos puedan avanzar, incluyendo cerrar brechas de información, coordinación y acceso”.

Fuente: El Mercurio

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