Exploración Minera: No hipotequemos el futuro
Juan Cariamo, Co CEO Vantaz Group.
Juan Cariamo, Co CEO Vantaz Group.
La exploración es clave para las economías mineras. Es la base sobre la cual se construyen portafolios de proyectos que permiten asegurar buenos niveles de explotación en el largo plazo sobre todo, cuando los recursos son cada vez más escasos y de creciente complejidad.
Basta que los números se contraigan para que las compañías recorten los presupuestos asignados a exploración. De toda lógica dirá la mayoría, para qué gastar recursos cuyos resultados podrían -porque la exploración es por definición una apuesta- no ser los esperados. Mejor optimizar la operación, los recursos humanos, la sustentabilidad y el trabajo con comunidades, en definitiva, asegurar los proyectos en curso y el retorno a los inversionistas en épocas de incertidumbre de cómo se comportará la economía global. Sin embargo, una lógica tan eficiente como ésta puede terminar por limitar el futuro de la minería.
La exploración es clave para las economías mineras. Es la base sobre la cual se construyen portafolios de proyectos que permiten asegurar buenos niveles de explotación en el largo plazo sobre todo, cuando los recursos son cada vez más escasos y de creciente complejidad.
Tener portafolios con reservas probadas sin duda asegura en el largo plazo un mayor valor de mercado de las compañías. Además, permite que la cadena de decisiones que conlleva implementar un proyecto se piense y diseñe sobre bases sólidas, lo que implicará un mejor manejo de la inversión.
En esto incide fuertemente la evidente disminución de los recursos minerales, tanto en cantidad como en calidad. Hoy la mayoría de los cuerpos que se han encontrado y que podrían llegar a convertirse en proyectos abordables, tienen leyes muchísimo más bajas que las había hace 10 o 20 años en Chile.
Una buena exploración minera debe considerar tres aspectos. El primero es el financiero. En un momento en el que el precio de los minerales ha bajado, las compañías han optado por optimizar su portafolio de proyectos y eliminar o postergar la exploración a la espera de mejores precios. El clásico trade off entre el corto y el largo plazo.
Segundo, la calidad de la gestión de la exploración. Es importante que las compañías se preocupen de pensarla y dejarla en manos de ejecutivos con visión.
Y por último, innovar. Preguntarse qué capacidades de mercado y tecnológicas estamos usando. En Chile tenemos buenos geólogos, buenas escuelas, y excelentes recursos naturales, pero siempre es vital preguntarse si les estamos sacando el mejor provecho.
Creo que en este punto tenemos temas pendientes. Debemos incorporar innovación tecnológica de manera de abaratar los costos de las campañas y lograr información de creciente calidad. Los hallazgos incluyen búsqueda en zonas remotas y de difícil logística, y la tecnología puede aportar una enormidad. Este es un desafío.
No descuidemos la exploración, aún en las vacas más flacas. Este negocio se trata de costos, pero también de inversión. El desempeño y la valoración de mercado de una compañía también dependen de lo atractivas que resulten las reservas probadas que exhiba. Y la calidad y efectividad de las inversiones, de cuánta información esté disponible al momento de tomar decisiones, y en eso la exploración es vital.
Por Juan Cariamo, Co CEO Vantaz Group.
