El nuevo gobierno y su plan para la minería

26 marzo, 2018
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(Ilustración: Fabián Rivas)

(Ilustración: Fabián Rivas)

Una serie de medidas para “fortalecer la industria minera nacional” propuso Sebastián Piñera cuando era candidato. Ahora, ya instalado en La Moneda, esas mismas propuestas y medidas son analizadas bajo la lupa de representantes de distintos sectores ligados a la minería.

Por Camila Morales
Revista Nueva Minería y Energía
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Nuevos aires se respiran en el sector minero. Luego de un periodo caracterizado por una desaceleración a nivel mundial, desde hace algunos meses el rubro se ha visto favorecido por mejores precios de los metales que han permitido mirar el futuro con algo más de optimismo.

Si bien no se visualiza un nuevo “súper ciclo” del cobre -tal como sucedió entre 2005 y 2013-, las proyecciones apuntan a un periodo más estable en el precio de los principales metales en las bolsas de valores internacionales, lo que incide directamente en la manera en que se desarrollará la minería a nivel local.

Este es el contexto que tendrá el principal sector económico del país durante el nuevo gobierno de Sebastián Piñera, escenario que permite proyectar mayores ingresos a las arcas fiscales y por lo tanto, mayor gasto público en lo que serán las prioridades de la nueva administración.

Pero, ¿qué decisiones tomará el gobierno para el crecimiento de la minería? ¿Qué visión se tiene en el propio sector respecto a las propuestas que planteó durante la campaña presidencial del año pasado el entonces candidato Piñera?

A continuación, un análisis de las medidas programáticas de Sebastián Piñera para la minería, bajo la lupa de representantes del sector, académicos y economistas.

Objetivos y medidas

Cuando el hoy Presidente de la República aún estaba en carrera por el sillón presidencial, su equipo programático dio a conocer los principales ejes a los que se abocaría su eventual gobierno para lograr una meta: posicionar al sector minero como un motor de recuperación del crecimiento económico.

Para alcanzar este objetivo, el equipo de campaña planteó en su momento promover la cartera de proyectos mineros, crear un plan estratégico para la minería 2018 – 2050, reducir la incertidumbre regulatoria “a través de reglas claras y estables”, impulsar la innovación y competitividad en el sector, generar nuevos mecanismos para potenciar una mejor industria de proveedores, y promover más entidades de asociatividad público – privada, entre otras propuestas.

Para el presidente ejecutivo de Alianza Valor Minero, Álvaro García, estas medidas “son bien intencionadas”, ya que a su juicio, van en el camino del desarrollo productivo de la actividad minera. “Habrá que esperar su ejecución, y esperamos, por cierto, éxito en su aplicación y resultados”, agrega.

Una opinión similar es la que tiene el director de la Escuela de Minería y Recursos Naturales de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Central, Miguel Ángel Durán. De todos modos, el académico enfatiza que el nuevo gobierno debería focalizar “sus mayores esfuerzos en medidas que apunten a reactivar la inversión en minería, lo que además nos permitirá retomar la senda de un aumento en la producción de cobre”.

Este énfasis en fortalecer las inversiones en el sector encuentra consenso entre los entrevistados. Sin embargo, asoman algunas diferencias respecto a los principales ejes que debiera abordar el nuevo gobierno para alcanzar esos objetivos.

El plan estratégico para la minería

Uno de los temas que ha llamado la atención del economista y asistente de investigación de la Cepal, Felipe Correa, son aquellas que tienen que ver con Codelco, y en particular, con las medidas que buscan mejorar su funcionamiento.

“Algo muy destacable del programa del nuevo gobierno es cuando propone para Codelco definir una política de dividendos estable a largo plazo y reemplazar la Ley Reservada. Codelco es la gran empresa de Chile y un orgullo para la historia del país, además de ser la mejor opción para rentabilizar los fondos soberanos. Asegurar su correcto funcionamiento, tanto en cuanto a capitalización como a transparencia, es fundamental”, asegura el economista.

Respecto a esta empresa estatal, Sebastián Piñera había dicho como candidato que en un eventual gobierno suyo esperaba fortalecer a Codelco a través de la “profundización de su autonomía y dándole mayor independencia a su gobierno corporativo respecto a los cambios de gobierno”.

Todo esto formaría parte del ‘Plan estratégico para la minería 2018 – 2050’, una suerte de hoja de ruta que se ha propuesto desarrollar el nuevo gobierno para el sector.

Pero, ¿hacia dónde se debería apuntar este plan estratégico? Para Álvaro García, este plan debiera abordar los riesgos y oportunidades del presente y también considerar los cambios de cara al futuro. “Este debiera apuntar a fortalecer el rol del Estado a través del ministerio y sus reparticiones, generar las condiciones para el desarrollo de nuevas inversiones, fortalecer el carácter virtuoso de la minería, apuntar hacia la sustentabilidad, la inclusión y las nuevas tecnologías, e incrementar la valoración de la actividad en la ciudadanía”, dice.

Sobre este último punto, el director del Departamento de Ingeniería de Minas de la Universidad de Chile, Xavier Emery, sostiene que “la sociedad chilena tiene que ver a la minería como una oportunidad y una fuente de progreso, no como un enemigo”, razón por la que se muestra convencido de “difundir a la ciudadanía los beneficios y la relevancia del rubro”.

En el marco de este plan estratégico, también existe consenso sobre la necesidad de que este programa se transforme en una política permanente y de largo plazo, constituyéndose en el eje central para el desarrollo futuro de la minería en Chile.

Sin embargo, en la opinión de Miguel Ángel Durán, hay algunos puntos centrales que deberían estar incluidos de manera indispensable: “Fortalecer la estructura orgánica de las instituciones de gobierno en minería; fortalecer la gestión y financiamiento de Codelco, potenciar el rol de Enami, desarrollar innovación tecnológica, defender el mercado y nuevos usos del cobre, y que existan mecanismos permanentes de desarrollo para la inversión en minería”, propone Durán.

Modificar el marco regulatorio para la pequeña y mediana minería es una de las propuestas incluidas por el equipo programático del nuevo gobierno al 2022. (Foto: Joaquín Ruiz)

Incertidumbre regulatoria

Otro punto comentado del programa minero de Sebastián Piñera es la “reducción de la incertidumbre regulatoria a través de reglas claras y estables”. Actualmente existe una especial preocupación por la incertidumbre que generan las indefiniciones en el uso del territorio y la creciente judicialización de los proyectos; aspectos que continúan siendo un tema sin solución.

En los últimos años ha existido un llamado generalizado por parte del sector para trabajar en este punto, tomando en cuenta que la inversión en minería representa casi el 40% del total de las 50 inversiones más grandes proyectadas para el quinquenio 2017-2021.

“Resulta indispensable mejorar la institucionalidad para reducir la judicialización y la extrema tramitación de los estudios de respaldo de los nuevos proyectos mineros”, recalca Xavier Emery.

Para alcanzar este propósito, Álvaro García asegura que la aplicación de una política pública iría en el camino correcto. Así se podría establecer “una institucionalidad de gestión, coordinación y diálogo para las inversiones, lo que permitirá una base sólida, con reglas claras que eliminen todo atisbo de incertidumbre y establezca el procedimiento adecuado que supone acuerdos de beneficio compartido tanto para quienes invierten, como para el territorio que acoge el proyecto”, agrega.

En línea con esta demanda, la creación de una agencia de grandes proyectos de inversión, es otra de las medidas que buscará impulsar el nuevo gobierno para atraer, coordinar y agilizar las nuevas inversiones.

Todo esto, además, debiera ir acompañado de la llamada “licencia social para operar”, advierte Miguel Ángel Durán, junto con una definición clara respecto a qué parte de los fondos que genera el royalty minero se deberían quedar en las regiones en las cuales hay minería.

Con este tipo de medidas, el gobierno de Sebastián Piñera buscará fortalecer a la minería, tal como lo prometió como candidato, en la campaña presidencial. Sin embargo, se puede anticipar que será una tarea compleja, ya que un gobierno debe lidiar diariamente con una serie de desafíos políticos, económicos y sociales que ciertamente compiten en prioridad.

Tal como señala Álvaro García, “Chile es un país minero. Sin embargo, hasta el momento no se ha dotado de los instrumentos que le permita consensuar una estrategia de futuro y convenir el camino para hacerla realidad. Como dice el refrán, ‘el que no sabe dónde va, nunca llega’. Y ése es un destino que no deseamos”.

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